La maldad y la astucia del zorro
Yo no sé si los políticos que actualmente gobiernan (perdón, quise decir desgobiernan) Cataluña son inteligentes, mediocres o gente del montón, o simples tarados, pero al gobierno español le están haciendo caer en cada trampa propia de verdaderos pardillos.
El pasado 1 de octubre, a pesar de todo lo que se nos había dicho por parte del Gobierno central de que no iba a haber referéndum, porque era ilegal, y que no habría locales, ni papeletas ni urnas, al final hubo de todo. Para más escarnio y cachondeo, los miles de partidarios del circo que los gobernantes o “desgobernantes” (perdón por el palabro) catalanes habían montado, se adueñaron no solo de los locales destinados a la votación, sino que también se hicieron dueños de la calle, y se enfrentaron en plan numantino a las fuerzas españolas de orden público (Policía Nacional y Guardia Civil) –no menciono en esto a la policía autonómica, porque esa parecía estar mirando para otra parte y del lado de quienes tan bien pagados les tienen–, y para acabar de rematarla, los levantiscos y fuera de la ley supieron vender a todo el mundo, fuera de nuestras fronteras, la imagen de una España opresora que según ellos, “no sólo les prohíbe votar, sino que además, cuando lo intentan, les manda a unas fuerzas de orden público que arremeten con cuantos catalanes encuentran a su paso, apaleándoles de manera inhumana”. Total, que ese día supieron ganarnos la partida y salirse con la suya. Hicimos, como suele decirse, “un pan como unas hostias”. No quiero buscar culpables, no es mi intención. Tampoco sería justo por mi parte, ya que no soy experto en tácticas o estrategias de orden público, pero está claro que alguien y algo falló en todo esto estrepitosamente.
Para terminar, se me ocurre decir que estos montaraces gobernantes, o “desgobernantes”, de esa parte de nuestra España podrán parecernos antipáticos, indeseables, enemigos de la patria y de la convivencia en paz y orden, o cuanto se nos pueda ocurrir, pero lo que demuestran es ir por la vida con la maldad y astucia del zorro, aunque nos parezca que (con perdón) no pasen de tener la inteligencia del asno.
José Luis Álvarez Lauret, Gijón
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo