Barracas y San Mateo en los barrios
Respecto a la instalación de las barracas de San Mateo, la postura de los vecinos de la Losa ha prevalecido sobre otras opiniones que pedían instalarlas en ese lugar, argumentando las molestias que dichas barracas les causaban. Todos podemos opinar sobre dicha medida en muchos sentidos: que si los niños de Oviedo y los visitantes se quedan sin atracciones, que si las once de la noche es una hora prudente para terminar su actividad, que si no ponen megafonía no molestan tanto durante el día..., pero la cuestión primera es que si los vecinos directamente implicados, que viven a escasos metros, se sienten molestos, es su postura la que tiene que prevalecer, sí o sí, porque ninguno vivimos allí para que nuestra opinión prevalezca sobre la de ellos, ni siquiera la de los hosteleros de la zona, también implicados.
Ahora bien, esta medida choca frontalmente con otra iniciativa durante estas fiestas, que es la llamada San Mateo en los barrios; por ejemplo, los vecinos de la plaza del Conceyín, en La Corredoria, nos encontramos con que nos ponen debajo de nuestras casas una carpa extrañamente enorme para uso de cuatro negocios de hostelería de la zona, junto con actuaciones de orquesta y discjockeys hasta la madrugada durante cinco días, todo ello a iniciativa de dichos hosteleros, con la colaboración del Ayuntamiento, y en ningún momento consultando con los vecinos directamente implicados.
Si en la Losa unas atracciones feriales sin megafonía, que terminan a las once de la noche, molestan a la vecindad y se anula su instalación, me pregunto cómo se puede permitir la instalación en la plaza del Conceyín de una orquesta hasta altas horas de la madrugada, con el volumen que alcanza, a escasos metros de los edificios. La única respuesta es que la opinión de los vecinos de la Losa importa más que la de los de la plaza del Conceyín, que lo que no vale en un bario, sin embargo, en otro no implica nada, en definitiva, que hay clases dentro de los vecinos de Oviedo para nuestro Ayuntamiento.
Nos encontramos en período lectivo para nuestros niños y chavales, la gente ya no se encuentra de vacaciones, no es normal que durante cinco días nuestro descanso se vea afectado, y no sólo por la música, porque la carpa con bar atrae mucho más ruido y daños a la plaza por la acumulación de gente, siempre hay alguno en estado no muy sobrio molestando, trasiego de mercancías para el bar, de botellas rotas, de cristales, de suciedad, muchas más molestias que, por ejemplo, la instalación de unas barracas para niños.
Todas las actividades diurnas que se quieran bajar del centro durante San Mateo serían bienvenidas a nuestra plaza, pero limitar nuestro descanso durante tantos días (a ver quién levanta a mi cría a las ocho de la mañana cuando no pudo pegar ojo hasta las tres) no tiene razón de ser.
En la plaza del Conceyín hacemos un ejercicio de tolerancia y convivencia todos los años en junio al celebrar las fiestas de San Juan durante muchos días, fiestas que dejan la plaza hecha un desastre y con imágenes a diario que no reproduzco por no asquear a los lectores, pero que toleramos por tradición de nuestro barrio, tradición que en el caso de San Mateo, al igual que en la Losa, no existe en La Corredoria. Por favor, pido al Ayuntamiento de Oviedo que no nos haga pasar por segunda vez en el verano por lo mismo, que lo que en otros barrios más céntricos no se permite no se traspase a los barrios más periféricos sólo por afán de lucro de varios hosteleros de la zona, sin ningún tipo de miramiento con los aproximadamente 1.000 vecinos de la plaza.
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