Buscador de topónimos

Piedrafita

Tanto los topónimos del tipo fitu ‘mojón’ como el apelativo sofitu ‘apoyo, rodrigón’, tienen un antecedente en los participios latinos de fingere ‘fijar, insertar’ (OLD), esto es FICTUS, A, UM, con una variante FIXUS, A, UM ‘clavado’.

Desde FIXUM se formó el apelativo finsu, finxu, incluso fiensu ‘mojón’ (318 p. 201), hisu ‘piedra que sirve de orientación en el camino’, con pervivencia en la toponimia menor aunque no en la mayor, El Fiensu (No, Na), El Fiensón (Sg), El Fiensín (Sg), etc. En la documentación medieval hay frecuentes referencias a los petrefissos (indudable resto de una construcción con genitivo) o mojones de piedra; así p.e. “Et petrefixum deorsum” (SV p. 123, a. 1058), “Petrafixo de Taulato” (MB a. 1159) y también a la expresión apocopada “fixo” (DCO a. 912, c. XII).

Algunos topónimos presentan únicamente el participio FICTUS nominalizado, así El Fitu, monte en la divisoria de Caravia, Colunga, Parres. Pero otras veces fitu, fita pueden mantenerse como adjetivos en una composición de dos o más palabras; así: Piedrafita (Vv, Mi, Ri, Cn, Vd, Bab)44, Ríu Piedrahita (Co), Parafita (Ti)45 que significan propiamente ‘piedra cla vada’ > ‘mojón’.

Confita (Ib), La Conhita (Lln), Regueiru Confitas (Cn) supone también un compues to con un primer elemento CUM ‘con’ y un participio FICTAM ‘la (piedra) que marca el límite común’. Es algo que nos recuerdan los topónimos del tipo Conforcos (Ay, Mi) y, en parte, lo mismo que aparece como Biforcos o El Bihorcu (p. 137).

Un ejemplo más en que la piedra hace referencia al mojón lo encontramos en la toponimia menor, así en Peramartín (Sg), literalmente ‘la piedra de Martín’, esto es, ‘el mojón de Martín’, que aparece en 1678 documentado así: “el prado de Pera Martin que es de Don Francisco Vigil Quiñones, en cuya esquina se allo un finso antiguo” (Pedregal Montes Toponimia 43).

Un límite de terrenos probablemente nos lo recuerden lugares llamados Fitoria (Uv), Fitories (Vv).