Hasta ahora considerábamos que Anlleo (Ni), documentado “ecclesiam Sancte Marie de Anleio” (DCO p. 81, a. 912, c. XII), debería interpretarse desde el lat. *ANGULETUM una formación iniciada en angulum ‘ángulo’ (EM) (361 p. 243, 255), a no ser que se tratara de un derivado antroponímico.
Hoy nos resulta difícil mantener la primera de estas suposiciones por dos razones fónicas: en primer lugar porque de -NG’L- no se sigue en Navia, en principio, un resultado con palatal lateral -ll- sino otro lateral central -y-; para pensar que Anlleo guarda relación con el verbo *ANGULARE ‘estar en el ángulo’, ‘curvar’ > gall. anllar debería pensarse que se produjo un error en la transmisión fonética del topónimo pues tal étimo haría esperable un resultado *Anyeo. No nos resulta válido decir que siendo hoy Anlleo tierra de confusión yeísta la escritura “Anlleo” es arbitraria dado que en las zonas colindantes, donde se siguen distinguiendo las palatales, se pronuncia -ll- en la zona inmediata “gallego-asturiana” y -ll- en la “vaqueira”.
La segunda razón porque la grafía medieval (“Anleio”) y la pronunciación actual (Anlleo) no aconsejan partir de una -T- puesto que esa consonante no se perdería en gallego-asturiano en los continuadores de -ETUM.
La grafía medieval, por su parte, aconseja que partamos de un étimo con -LL-, o con L en posición fuerte si es que se trata de un topónimo compuesto; por otro lado, para justificar la última parte del topónimo, la documentación medieval nos sugiere partir de un grupo del tipo LJ > y, o bien de una nasal que, perdida, deje una yod antihiática.
Por esas razones me atrevo a sugerir como propuesta etimológica más fiable aquella que parte del antropónimo ANNALENUS (Solin) —> *an’leo —> Anlleyo (“anleio”)36 —> Anlleo.