Otra raíz prerromana presente en el occidente peninsular así como en los Pirineos y Alpes es *PAL- , *PALA- ‘montaña, roca’ (5 II p. 169; 112; 27 p. 412; 140 p. 230; 155 p. 286). Para establecer sus oríge nes se ha hablado de un antecedente ligur (Menéndez Pidal), medi terráneo (Bertoldi), preindoeuropeo (Meyer-Lübke) y véneto-ilirio (17 p.321).
Parece evidente que esta raíz la encontramos en topónimos asturianos del tipo:
Paluverde, islote calizo de Ribeseya.
El Palu Po, islote en Llanes.
La Pica’l Palu, peñasco calizo de Llanes.
Los Palos (Cñ), dos peñas en la mar.
El Porru Piedepalu (Co) (cf. 402), etc.
Esa misma raíz prerromana podemos tenerla en el llamado El Puertu’l Palu, ejemplo de elevación pétrea carente de vegetación, en términos de Allande.
Quizá una variante femenina la tengamos en Palombierga (Am) que debemos interpretarlo como ‘peña sombría o que da mucha sombra’, acaso referida al Picu Teyéu en cuya ladera se sitúa la casería citada. Evidentemente -ombierga está formado sobre el lat. UMBRAM ‘sombra’ seguido del abundativo -iega. Del mismo modo La Peña l’Ombre (Bi) puede significar ‘la peña de la sombra’, ‘la peña oscura’ si bien es cierto que cabe pensar que pudo haber una motivación con la figura humana en el origen de tal nombre.
Paladeperre (Vd) nos recuerda el ya citado más arriba, y acaso tautológico Malperru (Ce). Quizá el mismo elemento se encuentre en La Peluca Baxo (Cr) muy próximo a los del tipo La Perruca que, si no se trata de un diminutivo de parra, han de traducirse por ‘peña’, ‘piedra’.
Más difícil resulta Palmián (Cg), Palmiano (Si) (269 p. 33) pues podrían entenderse como antiguos antropóni mos, si no se trata del mismo elemento *PAL- seguido del adjetivo MEDIANUM. Lo mismo ocurre a otros como Palla (Pr), El Castru Doña Palla (Pr)20 pues parece que su antecedente estaría en el antropónimo latino PALLA (Kajanto p. 345) que se continúa en nuestra Edad Media en el conocido nombre de “domna Palla” (DCO a. 1058, c. XII; a. 1069, c. XII; a. 1072; cf. 411 I, p. 310).
Quizá en relación con los apelativos y topónimos menores del tipo pallera ‘escondrijo’, ‘osera’ de que dan cuenta la lengua actual y los documentos medievales, se encuentre la palabra prerromana PALA ‘peña’ presente en las inscripciones lepónticas y en lusitano (“Trebopala”), aunque pudieran ser cosas distintas (351 p. 69).