Carácter defensivo tuvieron probablemente las torres, del lat. TURREM ‘edificio elevado, lugar fortificado’ (OLD), que se levantaron en muchos lugares (31 p. 153; 241 p. 114) y que dieron nombres a diversos pueblos aunque puede que hoy no todos presenten vestigio externo que nos lo indique (cf. 439):
La Torre (Rd, Co, Pi, Vv, Xx, Cñ, Go, Ra, Lr, Uv, Si, Sg, Ll, Tb, Ct, Is10), La Campa Torres (Xx), Torre te yera (Vv), Torrevega (Lln), etc.
Abrigo la sospecha de que ast. turria ‘talud’ ha de considerarse formación efec tuada desde TURREM en un intento hipercaracterizador del género, algo parecido a lo que encontramos en el derivado de SAEPEM > sebe —> sebia ‘cercado vegetal’. En el caso de TURREM > torre —> *torra se habría producido, tal vez, el influjo del verbo *torriar ‘hacer un talud’ —> turriar ‘poner pared junto al talud’ responsable de la yod que, a su vez, inflexiona a la tónica. Está presente en la toponimia en ejemplos como La Turria (Vd).