Buscador de topónimos

Topónimos con antropónimo femenino o adjetivados con sufijo femenino

En los siguientes topónimos la terminación femenina ha de achacarse mayoritariamente a la concordancia de la cosa poseída (VILLA...) con el antropónimo y, en algún ejemplo, a la misma ter minación latina no necesariamente asociada a nombre de mujer:

L’Altamira (Av, Go)392 ALTE-MIRUS (141/9).

Alea (Rs) ALEDIUS (Solin).

Anduerga (Lla)393 ANDERGUS (354 p. 265).

Ania (Lr)394 ANNA (354 p. 265) / ANNIA (ILER) / ANNIUS (ILER).

Beronda (Pi) VERUS + ORONTIUS (cf. 256) 395.

Caranga d’Abaxu (Pz), Caranga d’Arriba (Pz)396 CARANCA (334 p. 150)397.

La Carisa (Uv) CARISIUS (Solin)398.

Caveda 399 CABEDUS (268 n. 51)400.

Cayarga (Pa)401 CABARCUS (CIL II 5739; 267 p. 40).

Ceneya (Am) CINNEIUS (Solin) o CINNENIUS (Solin).

Cesa (Cñ) CESA (248 p. 20) / CESSIUS (Solin) / CAESIUS (354 p. 274) / CECCIUS (Solin)402.

Cibea (Cn) CIPEIUS (Solin).

Cuaña COANIA (354 p. 280)403 / COENIUS (Solin).

Daxa (Vv) DASSIUS (Solin) / DASIUS (Solin).

Dolia (Md) DULIUS (Solin) / DULLIUS (Solin)404.

Doriga (Sl)405 DORICA (cf. 382).

Ixena (Co) GIGENNIUS (Solin) / INGENIUS (Solin).

Llabra (Co) LABRIUS (Solin).

Llampaya (Uv)406 LAMPADIUS (20 p. 241).

Lloza (Cu) LOTIUS (Solin) / LOTTIUS (Solin) / LUTEUS (Solin) / LUTIUS (Solin).

Lluaria (Vv) LEOVARIUS (319 p. 107).

Mora (Cr) MAURUS (Ka janto) / MAURA (ILER).

Nera (Ti)407, Ñera (Go) NERIUS (Solin).

La Paerna (Llg) PATERNUS (268 p. 154).

Proaza PROBATIUS (Kajan to; cf. 246)408.

Pendia (Bu) PENTUS (354 p. 290).

Rica (Cñ)409 RICUS (141: 353).

La Rumía (Ll) ROMILIUS (Solin) (p. 160).

(San Xuan de) Nieva (Av)410 NAEVIUS (248 p. 22).

La Sedernia (Tb) SETERNA (Solin).

Sena (Ib, Bab411) *SENNUS { —> Sennius (Solin)} .

Siña (Am) SIGNIUS (Solin) / SIMNIUS (Solin).

Taxa (Tb)412 TAIUS (So lin).

Tueya (Xx) 413 TUTILIUS (So lin) / TUTELIUS (Schul ze p. 146)414.

Tiuya (Llg)415 TUTILIUS (So lin) / TUTELIUS (Schul ze p. 146) / TEO DILDA (141: 271; 55 p. 42).

La Vana (Ce) ABANUS (268 p. 291; 354; 251).

La Vita (Pa) *VITTA (—> VITTATUS (Solin)416.

Xera (Ti)417 GERA (RAC p. 319).

Sin duda a la lista debemos añadir:

Catuxa (Pi) podría representar el antropónimo asturiano de idéntica expresión. En cualquier caso se trata del equivalente de una posible adaptación del sufijo diminutivo intuido en CATARINA —> Catalina, sustituido por el ast. -uxa.

Culiema (Cn), documentado “Colema” (LRC: Leal) y “Culuenna” en 1385 (cf. 351), quizá relacionado etimológicamente con el antropónimo COLONUS (Solin), acaso una *(VILLAM) COLONEAM.

Es posible que también Tameza, nombre de parroquia y concejo418, que parece justificarse desde TAMECIA (CIL XIII 3542), quizá lo mismo que Tameces (Po, Pi).

Del mismo modo Maeza (Sl), documentado “Malleza” (DMB a. 1290), parece que remonta a un antropónimo MALLIUS (CIL II 5946), el mismo que sin yod vemos en Mallayu (Ti), con una incrementación -ECIA o -AECIA, tal vez por tratarse de una antigua villa. Sólo por razones de proximidad y tamaño se extendió el nombre diminutivo a Maecina y Maecín todos ellos en el mismo concejo de Salas419, en un proceso distinguidor que también encontramos en otros concejos como Proaza frente a Proacina, etc.

Ouria (Bu) plantea el problema de saber si se trata: a) de un continuador de antropónimo AUREUS (Solin) o AURIUS (Solin)420; b) de una simple motiva ción cromática con el significado de ‘áurea’, ‘dorada’, ‘amarillenta’, posible en algunas combinaciones sintagmáticas Villaverde, Villallla; c) de una referencia hidronímica (p. 212).

En el mismo caso se encuentran los topónimos portadores del elemento como:

Vallouria (Sl) y Villoria (Llv)421 entiendo parecen mejor ser de origen antroponímico o cromático.

Fontoria (Llv), Fontouria (Md, Vd)422, llontoria (Lln) podrían estar motivados por el color o por la hidronimia.

Veigadouria (Bu, Ve) y A Cabana d’Ouria (Bu) parece que están motivados por el mismo elemento Ouria (Bu), pues todos ellos se encuentran en el concejo de Bual y me inclino por considerarlos de origen antroponímico.

En algún caso la terminación en -a puede deberse a un tardío nombre de mujer o a un nombre germánico masculino:

Alevia (Pb) ALEVIA (224 p. 99)423.

Armilda (Gs) HERMILDA (141: 78/10).

Bixega (Md), documentado “Uegega” (DCO p. 123 a. 992, c. XII; DMB a. 1246), BEGICA (141: 41).

Ema (An)424 EMA (224 p. 258).

García (Cr) GARTZEA (cf. 394)425.

Godella (Ef) GODELLA (141: 146/38).

Godina (Pr) GOTINA (141: 146/40).

La Gualamar (Tb) *WALA-MAR(I)US (141: 288)426.

Iboya (Go)427 EVODIUS (224 p. 285).

La Lleda (Av), Llede (Ca) LEDA (ILER).

Rosuaria (Bi)428 RASOARIUS (cf. 224).

Tarna (Xx, Ca) TARNA (20 p. 116) (cap. 13).

Quizá debiéramos incluir en este grupo Bisllavera (Ti), que aparece documentado como “terminos de Guislavara” según lectura y propuesta de Leal (LRC)429, aunque encontramos un tratamiento del vocalismo tónico que no parece plenamente satisfactorio. Podría tratarse de un antropónimo germánico compuesto VISCLA-VARA (141: 311) o VISFLA-UARA (141: 312).

Un topónimo como Romadonga (Go) fue interpretado por Piel desde ROMA-DOMNICA (¿) (141: 225/NB), acaso con un primer elemento explicable por el gótico con el significado ‘espacio, estancia’ y, en consecuencia, combinado con un derivado del lat. DOMINUM; Romadonga equivaldría a ‘grupo de casas pertenecientes al señor’. Martín Sevilla (cf. 375) insinúa que ROMA ‘cementerio’, ‘cementerio sagrado’ podría tratarse de un elemento aportado a Asturias por hablantes britones (esto es célticos) latinizados y el topónimo originariamente pudo significar ‘cementerio del señor’ o ‘lugar sagrado’, acaso una referencia a un primitivo lugar de asentamiento de la sede de Britonia.

La Mafalla (Vd), La Mafalla (Cd) parece que responde a un antropónimo, acaso de origen germánico, *MAFALDA, aunque no dispongo de elementos para poder demostrarlo.

Baltesara (Mi) puede ser topónimo moderno rehecho sobre otro previo, Baltasar o Baltesar cuya generalización femenina responde al modelo de imposición nominal que se aplica a minas. En cambio en Nicolasa (Mi), como me comunica Pilar Fidalgo Pravia, según la documentación por ella consultada en el Ayuntamiento de Mieres, parece que el nombre de la explotación minera, que empieza a mediados del siglo XIX, se generaliza gracias a un topónimo preexistente, “La Nicolasa”, con que se conocía un pueblo, valle y río cerca de Lloreo. Posteriormente, “Nicolasa” pasa a dar nombre a la explotación minera que surtiría a “Fábrica de Mieres”. En algún caso, posteriormente, pueden estos nombres reconvertirse, en un intento catequético, motivando la aparición de advocaciones religiosas como es el caso de que al citado pozu lo cristianicen oficialmente como “San Nicolás”. Esa tendencia religiosa se ve en otros muchos casos más; así el pozu de L’Aragona (Tb) recibe popularmente su denominación por estar situado en las inmediaciones de la corriente de agua de tal nombre pero intentaron rebautizarlo oficialmente como “San Jerónimo”.