Continuamos con el infierno Somalí... y 2
¿Piratas en Somalia? ¿Qué les indujo a los somalíes a ejercer la piratería? Para mí, la defensa de su supervivencia. Primero les esquilman sus caladeros y, por si esto fuere poco, Somalia está siendo utilizada como vertedero para desechos peligrosos desde comienzos de los años noventa, y continuó desde la guerra civil desatada en ese país.
La basura es de muy diversas clases: hay desechos radiactivos de uranio, la basura principal y metales pesados como el cadmio y mercurio.
También hay basura industrial: desechos de hospital, basuras de sustancias químicas y lo que se desee nombrar.
Lo más alarmante aquí es que se está descargando basura nuclear.
La basura radioactiva está matando potencialmente a los somalíes y está destruyendo totalmente el océano. Ahmedou OuldAbdallah, representante especial de la ONU en Somalia, declaró a Al-Jazeera que las descargas de desechos siguen teniendo lugar en la actualidad.
El diplomático afirmó que poseía informaciones fidedignas de que son corporaciones europeas y asiáticas las que están descargando químicos y residuos nucleares en las costas de Somalia. Sí, las Naciones Unidas enviaron a sus representantes para constatar la catástrofe. Y sin más de cerró el capítulo.
Cientos de barriles son arrastrados contra la costa, los barriles se rompen, hay fugas. El contenido sale a la superficie y termina en las playas. La gente de la zona empieza a enfermar. Infecciones de vías respiratorias, hemorragias intestinales, extrañas reacciones químicas en la piel y más de 300 muertas repentinas causan alarma entre la población.
Al cabo de un tiempo, se dan nacimientos con malformaciones y diversas enfermedades. Nick Nuttall, portavoz del programa de Medio Ambiente de Naciones Unidas, explicó que cuando los envases se rompieron por la fuerza de las olas los contenedores expusieron a la luz una actividad espantosa.
Somalia está siendo utilizada como vertedero para desechos peligrosos desde comienzos de los años 90 y continuó desde la guerra civil desatada en ese país.
La basura es de muy diversas clases: hay desechos radiactivos de uranio, la basura principal y metales pescados como cadmio y mercurio.
También hay basura industrial, desechos de hospitales, basuras de sustancias químicas y lo que se desee nombrar.
Lo más alarmante aquí es que se está descargando basura nuclear. La basura radiactiva está matando potencialmente a los somalíes y está destruyendo totalmente el océano. Ahmedou Ould Abdalla, representante especial de la ONU en Somalia, declaró a Al-Jazeera, que las descargas de desechos siguen teniendo lugar en la actualidad. El diplomático afirmó que poseía informaciones fidedignas de que son corporaciones europeas y asiáticas las que están descargando químicos y residuos nucleares en las costas de Somalia.
Sí, las Naciones Unidas enviaron a sus representantes para constatar la catástrofe y sin más se cerró el capítulo.
Por el momento, no ha habido un solo juicio, detención o condena por estos actos criminales. Y esto no ocurre únicamente en Somalia, las aguas de otros países africanos como Costa de Marfil, Nigeria, Congo o Benin, también son empleadas como vertederos tóxicos por los países industrializados. Tan sólo en el año 2001, llegaron a África 600.000 mil toneladas de desechos tóxicos. El continente africano se ha convertido en el basurero de los desechos radiactivos generados por los países ricos.
Un país devastado que muere de hambre. Los países ricos acuden para arrebatarles la pesca y de paso contaminar sus aguas con basura tóxica nuclear.
Éste es el contexto en el que aparecieron los hombres que algunos medios denominan «piratas». Ante esta situación de absoluta indefensión algunos pescadores reaccionan de una manera desesperada, comienzan a aliarse en pequeños grupos armados y usando lanchas rápidas intentan ahuyentar a los barcos pesqueros extranjeros y disuadir a los buques que descargan residuos en sus aguas.
Esto es lo que dicen los pescadores somalíes: hace muchos años, solíamos pescar muchísimo, lo suficiente para comer y para vender en el mercado. Pero después llegaron los buques extranjeros de pesca ilegal que muchas veces vuelcan productos tóxicos que diezman las reservas pesqueras. Señoras y señores: éste es el mundo en el que nos ha tocado vivir. ¿Podemos hacerlo peor?
Sabino Álvarez Pazos
Mieres
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