La fauna del Pleistoceno en Asturias

Textos: Luis Mario Arce | Ilustraciones: Diego Álvarez Lao

El paleontólogo avilesino Diego Álvarez Lao investiga los mamíferos de la Edad del Hielo y los reconstruye en acuarelas de gran rigor científico

Diego Álvarez Lao (Avilés, 1975), autor de las acuarelas que componen esta informacion de la fauna de la Edad del Hielo, es licenciado en Geología y doctorado en Paleontología por la Universidad de Oviedo, en cuyo departamento de Geología trabaja desde 2011 como profesor de su especialidad. Interesado desde niño por los fósiles y la vida prehistórica, ha centrado su labor investigadora en paleontología de mamíferos del Cuaternario, principalmente en Asturias, pero también en otros yacimientos españoles. Paralelamente, ha ido desarrollando su faceta de ilustrador, en el ámbito de la naturaleza, con particular interés en la reconstrucción de especies extinguidas. Algunas de sus ilustraciones se han publicado en “National Geographic” y en otras publicaciones de relieve. Foto: Miki López

Megaloceros

(Megaloceros giganteus)

Este enorme ciervo, del tamaño de un alce (dos metros de altura en la cruz) y con las mayores cuernas que haya tenido nunca un cérvido (3,5 metros de envergadura), sobrevivió en Rusia hasta hace 7.000 años; en Asturias, donde sus restos son escasos, desapareció 28.000 años antes. Habitaba en paisajes abiertos

Lince europeo

(Lynx lynx)

Habitó en Asturias hasta hace dos mil años, con seguridad, y probablemente sobrevivió hasta el siglo XIX, e incluso el XX, ya que es más lógico, por afinidad ecológica, que las citas de lince de los últimos siglos correspondan a esta especie y no al lince ibérico. Actualmente vive en el centro y el norte de Europa, y en Asia

Caballo

(Equus ferus)

Los caballos salvajes, de aspecto similar a los actuales takhi de Mongolia, aparecieron en Asturias hace más de medio millón de años. Convivieron con los primeros caballos domésticos y, dado que los restos de unos y de otros son difíciles de diferenciar entre sí, se desconoce la fecha de su desaparición

León

(Panthera leo)

Muy extendido por Eurasia en el Pleistoceno (aparece en varios yacimientos asturianos), hoy tan sólo sobrevive en este ámbito un pequeño núcleo en la India y su área principal es africana. Era un león grande y fuerte, sin la melena que caracteriza a los machos africanos. Se extinguió en Europa hace unos 12.000 años

Praemegaceros Solilhacus

Casi tan grande como el megaloceros, este ciervo acaba de incorporarse a la nómina de fauna del pleistoceno asturiano con la publicación del análisis de los restos hallados en un yacimiento de Grado, de entre 800.000 y 500.000 años de antigüedad. Se han excavado restos más recientes (400.000 años) en Atapuerca

Hiena Manchada

(Crocuta crocuta)

Desaparecida de Europa hace unos 30.000 años, era de mayor tamaño que su estirpe africana actual. Habitaba en el interior de las cavernas y sus restos son comunes en los yacimientos asturianos. “Su poderosa dentición le permitía triturar los huesos para alimentarse de su médula”, explica Diego Álvarez Lao

Reno

(Rangifer tarandus)

Vinculado en la actualidad a las regiones árticas de Norteamérica –donde se lo conoce como caribú– y de Europa, desapareció de Asturias hace unos 12.000 años; su presencia antigua ha quedado registrada en cuevas como Tito Bustillo y Las Caldas. Desarrolló un grueso pelaje estacional como adaptación al frío

Bisonte de Estepa

(Bison priscus)

Antepasado del bisonte europeo actual, más grande (hasta dos metros de altura en la cruz) y con cuernos más largos, es frecuente en los yacimientos asturianos y asimismo aparece bien representado en el arte parietal. Los restos más antiguos hallados en Asturias tienen 150.000 años; desapareció hace 17.000

Oso de las cavernas

(Ursus spelaeus)

Tenía el tamaño de los grandes osos grizzli que actualmente viven en Alaska. No obstante, era más herbívoro que el actual oso pardo cantábrico. La abundancia de sus restos en las cuevas de Asturias sugiere que debió ser muy común. Desapareció hace unos 20.000 años. El oso pardo, de origen asiático, ocupó su lugar

Lobo

(Canis lupus)

Un superviviente, gracias a su capacidad de adaptación a diferentes medios y a muy diversas condiciones. Durante el Pleistoceno ocupó gran parte de Eurasia y de Norteamérica; su área de distribución actual se extiende desde las tundras árticas hasta la India. Sus restos resultan frecuentes en los yacimientos de Asturias

Rinoceronte Lanudo

(Coelodonta antiquitatis)

Gran rinoceronte, tan corpulento como el rinoceronte blanco africano, se caracterizaba por su densa capa de pelo y borra, y por su larguísimo cuerno nasal aplanado. Sobrevivió en Siberia oriental hasta hace unos 12.000 años; en Asturias desapareció 8.000 años antes, tras haber habitado la región durante 20.000 años

Mamut Lanudo

(Mammuthus primigenius)

Semejante en tamaño al actual elefante asiático, con unos 3,5 metros de altura en la cruz, es un típico habitante de las estepas frías del Cuaternario. Vivió en Asturias hasta hace unos 20.000 años; se extinguió sólo dos mil años antes de nuestra era en su último refugio en las remotas islas del ártico ruso (Wrangel)