Igrafo sabía que vendería equipos al Florida Arena antes de adjudicarse, afirma el PSOE

Oviedo,

David ORIHUELA

El PSOE de Oviedo responsabilizó ayer de parte de la supuesta trama de corrupción en las administraciones públicas, que han dado pie a la «operación Marea», al Ayuntamiento encabezado por Gabino de Lorenzo (PP). Y lo hizo a cuenta de la adjudicación del equipamiento deportivo, en concreto, las máquinas de la sala de ejercicios cardiovasculares del polideportivo Florida Arena a la empresa Igrafo, cuyo propietario, Víctor Manuel Muñiz, está imputado en el proceso. También Alfonso Carlos Suárez, el propietario de Almacenes Pumarín, la otra empresa en que se centran las investigaciones, «quería que Gabino de Lorenzo ganase las elecciones porque, según decía, así tendría una entrada de la hostia en el Ayuntamiento», denunció ayer, sumario en mano, el secretario general de la Agrupación Municipal Socialista de Oviedo y número dos en las listas a la Alcaldía, Alfredo Carreño.

El PSOE ovetense pide explicaciones a Gabino de Lorenzo. Carreño apunta principalmente a dos patas. Asegura que Víctor Manuel Muñiz sabía que le iban a adjudicar el contrato a Igrafo, porque así lo habría negociado con funcionarios municipales y, además, que logró el certificado para presentarse al concurso gracias al informe elaborado por una empresa filial de Igrafo, Nora.

Según leen los socialistas del sumario, «el 23 de agosto de 2010 el dueño de Igrafo sabía que le iban a dar el contrato, justo tres días antes de que la Junta de Gobierno certificase el concurso», apuntó Carreño. Una Junta de Gobierno en la que, recordó, «actuaba como secretaria Isabel Pérez-Espinosa», ex concejala del equipo de gobierno de Gabino de Lorenzo y ahora candidata del PP a la Presidencia del Principado.

Carreño dio más nombres. El de «una tal Paz, que seguro que no es la responsable de deportes del Ayuntamiento», dijo en tono jocoso; el de Jaime Reinares, concejal ovetense y diputado nacional; Eugenio Corpas, funcionario municipal, y el arquitecto José Antonio Mazoy, «que se ha llevado 72.000 euros en contratos de las obras del "plan E" en la ciudad», subrayó Carreño. El PSOE exige que De Lorenzo explique «quién era el concejal que veía todos los proyectos y por qué Paz recibió al propietario de Igrafo para hablar del Florida Arena y le habló de unas costas de 5.000 euros para el arquitecto y un 25 por ciento que se quedarían ellos». «¿Quiénes son ellos?», pregunta Carreño al Alcalde.

Además, en un principio Igrafo no se podía presentar a este concurso porque no tenía los certificados adecuados, «pero el Ayuntamiento procura que se audite a sí misma», dice Carreño, aludiendo a una conversación recogida en el sumario en la que Víctor Manuel Muñiz habla con un empleado de una empresa filial a Igrafo, Nora. En la conversación Muñiz explica que debe lograr unos certificados, «no vaya a ser que en la mesa -de contratación- alguien nos toque los cojones».

Alfredo Carreño entiende que De Lorenzo «no puede no saber nada» de todo el proceso y por eso exige que el Alcalde responda a todas sus preguntas y explique todo lo ocurrido «antes de abandonar la Alcaldía el 23 de mayo».