El pueblo de Villaviciosa, Rovigo, pudiera ser depositario del nombre de una deidad, R¯OB¯IGUM, a la que se invocaba para proteger a los cereales contra el tizón (EM).
Del culto a la diosa FORT¯UNA (EM), documentado epigráficamente en Asturias, no tenemos constancia de que haya pervivido toponímicamente pues el nombre de un lugar de Mieres conocido como Fortuna30 parece que se trata simplemente del de una explotación minera de implantación relativamente moderna.