Con la palabra de origen germánico SALA se designó también algún tipo de posesión agrícola, de índole señorial según Prieto Bances (153 p. 188) y, probablemente, origen de los actuales núcle os denominados La Sala (Lla59, Sl), Sala (Ct), Salas (Ll, Sl60), Sales (Cg).
Quizá Salamir (Ce) deba interpretarse como SALA MIRI ‘casería de Miro’, por más que otros vean en la totalidad el nombre de un posesor SALAMIRUS (141: 229/2). La acepción presu mible para el gótico SALA sería, según Piel (133 p. 393; 134), la de ‘establecimiento sedentario’, ‘fuego’.
Esta palabra, de amplia expansión extrapeninsular, explica no sólo los topónimos asturianos citados sino también los castellanos y otros nume rosos gallegos y portugueses del tipo Saa-, Sá-.
Encuentro, finalmente, que algunos topónimos como La Sala Cimera (Mi), La Sala Martín Piernes (Mi) son portadores de un elemento, sala, que parece que hace referencia a la terminología de la piedra, a juzgar por la descripción que se nos hace de los correspondientes lugares (EPA).