La Audiencia levanta parcialmente el embargo a los empresarios de la «operación Marea»

Víctor Manuel Muñiz. / Marcos León

Oviedo, L. Á. VEGA

La juez Ana López Pandiella, anterior instructora de la «operación Marea», negó a los empresarios implicados en este caso por irregularides en contrataciones del Principado, Víctor Manuel Muñiz, de Igrafo, y Alfonso Carlos Sánchez, de Almacenes Pumarín, que accediesen a una parte de sus bienes embargados con el fin de sufragar sus gastos de subsistencia. Los letrados Miguel Valdés-Hevia (Igrafo) y Javier Díaz Dapena (Almacenes Pumarín) recurrieron la decisión de la juez y un auto de la sección octava de la Audiencia Provincial, con sede en Gijón, les ha dado finalmente la razón, al levantar parcialmente el embargo para que los empresarios puedan disponer de cierta cantidad mensual, que no ha sido desvelada.

El auto de la Audiencia sostiene que no hay necesidad de embargar todos los bienes y que deben establecerse claramente las responsabilidades. Esta pequeña victoria de los empresarios se suma a la que ya obtuvieron con la reducción a la mitad de la fianza de 300.000 euros impuesta por la anterior juez.

No es la única noticia positiva para estos empresarios. Igrafo, con una deuda de 7,2 millones de euros, ha salido técnicamente del concurso de acreedores en el que estaba inmersa desde el pasado mes de febrero después de que un 63 por ciento de los acreedores hayan respaldado un plan de viabilidad de la empresa. Ayer finalizaba el plazo para la presentación ante el Juzgado de lo Mercantil número 2 de Oviedo del plan de viabilidad y de la propuesta de convenio, que debían ir acompañados de las adhesiones de los acreedores que representasen al menos el 20 por ciento del pasivo. A continuación se abriría un plazo de 20 días para sumar adhesiones hasta llegar al 50 por ciento de la deuda. El plan de viabilidad ha obtenido no sólo el 63 por ciento de respaldo, sino puede obtener más adhesiones en breve, hasta el 70 por ciento de la deuda. De esta forma, la empresa se ha adelantado a los plazos legales.

Entre las medidas incluidas en el plan de viabilidad se encuentra la reagrupación de la actividad en la sede principal de la empresa, situada en el polígono de Asipo (Llanera), por razones de eficacia y economía de gastos. Igrafo cerrará hoy su tienda en Gijón y transformará la de Oviedo en exposición.