Los implicados están vinculados a 35 propiedades

Oviedo, P. GONZÁLEZ /

L. Á. VEGA

El sumario de la «operación Marea», al que ha tenido acceso LA NUEVA ESPAÑA, vincula a los cinco principales implicados en la investigación con un total de 35 propiedades entre las que se cuentan pisos, casas, parcelas, locales comerciales y hasta naves industriales. La ex directora general de Planificación del Principado, María Jesús Otero, es la que acumula un mayor número de propiedades, hasta el punto de que aparece vinculada a 18 de ellas. Víctor Manuel Muñiz, de Igrafo, está ligado a ocho propiedades, aunque comparte algunas con sus socios de la empresa. Alfonso Carlos Sánchez, gerente de Almacenes Pumarín, está relacionado con menos propiedades, pero posee una de las más caras, un piso en Gijón valorado, según el informe elaborado por el grupo de Delincuencia Económica, en 540.000 euros.

El que menos propiedades posee es el ex consejero, José Luis Iglesias Riopedre, dueño de un piso situado en la calle Gascona de Oviedo, que adquirió a un precio de 15 millones de pesetas y que comparte en régimen de gananciales con su esposa. El informe policial no recoge las propiedades a nombre de su hijo, E. I. G.

La ex funcionaria Marta Renedo, por cuyas presuntas irregularidades se iniciaron las investigaciones, posee dos pisos y una casa. Uno de los pisos es el familiar, situado en la prolongación de la calle La Cámara, que fue adquirido a mediados de los años noventa por 11 millones de pesetas.

También tiene una finca de 1.750 metros cuadrados en Cadavedo (Valdés), que compró por 4,5 millones de pesetas. Allí construyó una casa familiar sobre la que posteriormente se constituyó un préstamo con garantía hipotecaria por importe de 108.000 euros. La tasación de la finca y la vivienda para una hipotética subasta es de 175.000 euros.

Finalmente, Marta Renedo posee un dúplex en la calle Cimadevilla de Oviedo a nombre de la empresa Implans Mounts S. L., que fue comprado en noviembre de 2008 por un importe de 420.000 euros. También sobre esta propiedad se constituyó un préstamo hipotecario por importe de 60.000 euros, del que se benefició un vecino de Estepona (Málaga).

En cuanto a Víctor Muñiz, posee una parcela con vivienda en Villanueva de las Manzanas (León), con una extensión de 1.075 metros cuadrados y valorada en su día en 60 millones de pesetas. También le consta una parcela con vivienda en Villanueva de la Cañada (Madrid), que se compró por 204.000 euros, y que se puso como garantía para un préstamo de 155.000 euros.

Tiene, además, otra imponente finca con casa en la localidad ovetense de Latores y un dúplex en la calle Pravia de Oviedo, adquirido por 246.000 euros. Por otro lado, participa junto a sus socios de Igrafo en la propiedad de tres locales comerciales en las calles Fuertes Acevedo y Menéndez Pelayo de Oviedo, donde estaban las tiendas de la empresa y que ahora serán exposición. Finalmente, es propietario con sus socios de una nave del polígono de Asipo, en Llanera, que costó 51 millones de pesetas.

En el caso de Otero Rebollada, la cosa se complica. En el Registro de la propiedad de Llanes le constan un finca rústica en Lledías, una finca de labrantía en Quintana, una casa de habitación El Collado, otra en Lledías, una cuadra con su pajar en la misma localidad, un huerto, un solar en la misma zona, una plaza de garaje en el edificio La Bolera de Llanes y una parcela en Poo.

Además, posee un piso con su sobrino y la esposa de éste en la calle Argüelles de Oviedo. No obstante, ha estado ligada a un piso en el edificio de La Bolera, que compró por 147.000 euros y vendió por 360.000 euros a Almacenes Pumarín; a una parcela en Poo que vendió a la empresa La Mazuga, en cuya administración participó; a una casa en Posada, que vendió a la empresa Buga 90, en la cuya administración también estuvo; otra finca en Posada que vendió a la misma empresa; una finca en Poo en la que se construyó el apartahotel Cueto Mazuga; y dos fincas más que vendió a Buga 90.

Finalmente, Alfonso Carlos Sánchez cuenta con un piso en la calle José Las Clotas de Gijón, valorado en 540.000 euros, un ático en la calle Libertad de Gijón, tres fincas en la parroquia de Fano (Gijón), en una de las cuales levantó una casa unifamiliar; y un local comercial en la calle Ampurdán de Gijón.

Los dos pisos que aparecen en las fotografías han sido claves en la investigación. En la de más arriba está el piso de Renedo en la calle Cimadevilla, a nombre de Implans Mounts S. L., una de las empresas que utilizó en sus supuestos fraudes. Sobre estas líneas, el edificio La Bolera de Llanes, que María Jesús Otero vendió a Almacenes Pumarín. La Policía sospecha que esta venta trataba de justificar los pagos a la ex directora general.