«Jorgito» era Fernández León

Jorge Fernández León. /

Oviedo, E. L.

Jorge Fernández León es viceconsejero de Promoción Cultural y, al mismo tiempo, un imposible de lograr para el empresario Víctor Manuel Muñiz, propietario de Igrafo. Las escuchas efectuadas por la Policía revelan cómo distintos interlocutores le dicen a Víctor que Fernández León «es muy raro y no quiere recibir» o que «se está escurriendo y no da la cara» sobre el «concurso de la caja escénica».

Pero el motivo por el que la juez Pandiella solicitó que se identificase al «Jorgito» que aparecía aludido en las grabaciones fue una conversación que la Policía graba en el teléfono de Marta Renedo el 25 de febrero de 2010, en plena tormenta tras haber sido descubierta. Habla con un tal J. B., que le manifiesta su «apoyo incondicional» y le pregunta «si no le habrán tendido una trampa». A los dos minutos y medio de charla, el tal J. B. le comenta que «siendo Ana Rosa amiga de Marta» «me extraña que no haya tapado esto, que no haya apagado el fuego». Renedo añade: «Yo no le echo la culpa a ella, bastante tiene ella con..., pues, con este disgusto». Afirma que va a «dar la cara» y que «no tiene nada, nadie, absolutamente nada que ver, nada, nada, es un tema exclusivamente mío, no lo sabían J., ni en mi casa, ni nada». J. B. le dice a Renedo: «Otros están por ahí montándolas muy gordas, mira Jorgito y tal, si no habrá montado cosas en treinta años que lleva», después añade que «Jorge le está tocando las narices a él y a M., que al parecer se lo quiere llevar al Niemeyer y hacerle un informe de por qué es necesario una filmoteca en Asturias y cómo se coordina con Niemeyer y la Laboral». J. B. le dice que la llamarán periodistas y añade que «de aquí a un año de las elecciones, aquí puede haber mucha tela marinera, y como ahora lo de Pepe el Ferreiro ya se agotó, pues tienen que buscar otra cosa; a Pepe el Ferreiro lo cesaron el día que yo fui a ver a Jorgito, con lo cual se le pusieron los pelos como escarpias».