Tratados de Libre Comercio y corporatocracia

Los Tratados de Libre Comercio (TLC) son acuerdos comerciales entre países para ampliar el mercado de bienes y servicios. Si realmente estos Tratados nos van a traer tantas ventajas comerciales y económicas como nos dicen, no tendría sentido que se oculte a la ciudadanía cualquier negociación al respecto o que se prohíba el acceso público a los documentos. Afortunadamente, cada vez más la ciudadanía es consciente de que los TLC no son simples acuerdos comerciales sino pactos geoestratégicos que trasvasan la democracia política a las multinacionales (lo que Susan George ha denominado corporatocracia).

A pesar de este intento de oscurantismo, se sabe que hay diversos Tratados que se están negociando como son: a) El TTIP, (Trasatlantic Trade and Investment Partnership). Acuerdo Transatlántico para el Comercio y la Inversión entre EE.UU y la UE. Dicho Tratado se está negociando desde el 2013 con absoluta opacidad y oscurantismo, teniendo como objetivo la eliminación de barreras que limiten los beneficios potenciales de las corporaciones transnacionales. Supone una amenaza para las normativas laborales actuales, conlleva la desregulación de la seguridad alimentaria y medioambiental, dará acceso a la información personal con fines comerciales, además de suponer un ataque a los servicios públicos con la privatización de la sanidad o la educación. b) El CETA (Comprehensive Economic and Trade Agreement). Acuerdo integral de Economía y Comercio entre la UE y Canadá. Se firmó en septiembre de 2014, pero debe ser aprobado por el Consejo de la UE y el Parlamento Europeo. Supondría una desregulación, como la que se ha expuesto anteriormente en el TTIP, pero en este caso, con los productos procedentes de Canadá país donde están instaladas un sinnúmero de multinacionales americanas. c) El TiSA (Trade In Services Agreement). Acuerdo Comercial de Servicios actualmente participan 50 países, incluyendo la UE y EEUU. Promueve la liberalización a escala global del comercio de servicios como la banca o el transporte y, por último, d) el TPP, (Trans-Pacific Partnership). Acuerdo Trans-Pacífico de Cooperación Económica, donde están implicados 12 Estados (EEUU y países del Pacífico). El acuerdo busca regular un gran número de temáticas, que van desde el comercio de lácteos, hasta la regulación laboral, pasando por derechos de autor, patentes, inversiones estatales y medio ambiente.

Estos TLC además, suponen todos ellos una clara estrategia geopolítica, para que Estados Unidos siga manteniendo su hegemonía económica y política. No es casualidad que en estos TLC, y a pesar de su importancia económica y demográfica, se excluyan al grupo de países emergentes, los llamados BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica). De esta forma, queda también patente, que estos TLC van más allá de ser unos simples acuerdos comerciales. Los TLC son una dictadura totalitaria de mercado que se esconden en propuestas aparentemente económicas cuando en realidad son propuestas políticas. En este sentido, supone la instauración de una corporatocracia, donde el poder de los Estados del Bienestar se les entrega a las multinacionales.

La ciudadanía cada vez es más consciente de las consecuencias que tendrían para su vida estos TLC, que desprecian incluso la Declaración Universal Derechos Humanos aprobada en 1948 por la Asamblea General de las Naciones Unidas. Desde diversos Ayuntamientos y Parlamentos han presentado Proposiciones No de Ley contra el TTIP y CETA. En Asturias hay de momento ocho Ayuntamientos que han aprobado mociones en contra de estos TLC: Bimenes, Castillón, Mieres, Langreo, Siero, Sobrescobio, Sariego y Gijón. Respecto al Parlamento Asturiano, el Partido Socialista Obrero Español, no solamente no se abstuvo, sino que se posicionó a favor del TTIP. Respecto al CETA, el Partido Socialista Obrero Español igualmente votó en contra de que el Gobierno de Asturias inste al Gobierno de España en funciones, en el marco del Consejo Europeo, de no autorizar la firma del acuerdo ni de autorizar la conclusión del Acuerdo Económico y Comercial Global (CETA) (sic), aunque aprobó otros puntos de menor importancia.

Desde la Plataforma Asturias no a los Tratados de Libre Comercio entendemos que el Gobierno en funciones de Mariano Rajoy no tiene legitimidad para ratificar la firma del CETA sin un debate previo en el Parlamento. Desde la campaña No al TTIP (compuesta por diversos colectivos sociales políticos y sindicales), se está realizando una semana de lucha que comenzó el día 8 de octubre y terminará el día 15 de octubre. Durante estos días se han realizado diversos actos y charlas, con el objetivo de que el actual Gobierno en funciones no dé luz verde al CETA en la cumbre que se celebrará en Luxemburgo el próximo 18 de octubre y que precede a la de jefes de gobierno del día 21 de octubre de 2016. Para ello, se ha convocado manifestaciones en más de veinte ciudades españolas; en Asturias en concreto, el sábado 15 de octubre de 2016 a las 12:30 en la Plaza del Humedal de Gijón.