El futuro de Libroviedo
Acaba de cerrar sus puertas Libroviedo y bien merece un reconocimiento a los profesionales libreros que, durante diez días, aun desatendiendo sus propios negocios, convierten esa carpa en una gran librería.
Las dificultades que estamos atravesando hacen que los recortes presupuestarios de los organismos que subvencionan Libroviedo, lo hicieran hasta el punto de poner en peligro su continuidad, y sólo el entusiasmo de sus dirigentes hizo posible que un año más los libros salieran a la calle.
Desde su primera edición (hace diecinueve años), Libroviedo fue creciendo en cantidad –y sobre todo en calidad–, por lo que resultaría un fracaso de quien tiene responsabilidades políticas en los organismos de cultura, que, por esos recortes lineales, Libroviedo no celebrase su vigésima edición. Los libreros no pueden aportar más, pues aunque no les sea rentable su participación en el evento, se conforman con lo que para ellos es su forma de vida: los libros y los clientes.
Cuando pusimos en marcha lo que sería Libroviedo, contamos con la colaboración de la Consejería de Cultura, Cajastur y, sobre todo, del Ayuntamiento de Oviedo, que a través de su concejal de Cultura, señor Fernández del Viso, y el apoyo total del alcalde, don Gabino de Lorenzo, para que los libreros pusiéramos en marcha lo que con el tiempo se convertiría hasta en modelo de gestión para otras ferias del libro de diferentes comunidades.
Ni en el peor de los escenarios posibles a causa de la crisis, no veo que Libroviedo no se pueda celebrar por falta de ayuda económica, pues tengo confianza plena en nuestro alcalde, por su sensibilidad manifiesta con el mundo de los libros.
Plasmar aquí las vivencias que durante tantos años supuso para los libreros el paso de tantos escritores, personalidades de todos los campos de la cultura, políticos y cuantos nos visitaron en Libroviedo sería tarea imposible.
Hay un hecho que, por su transcendencia posterior, quisiera resaltar, ya que tuvo lugar en la misma carpa. Retrasamos la inauguración de Libroviedo del año 2002, para asistir al funeral de Manolo Avello y como reconocimiento a su persona. Durante el recorrido de la feria, en una parte, el Alcalde se dirige a mi colega María Jesús Polledo y a quien esto escribe, para lamentar dicha pérdida y que había que ir pensando quién sería el próximo cronista de Oviedo. Hacía pocos minutos que, por casualidad, habíamos pensado que dicho título encajaba perfectamente en doña Carmen Ruiz-Tilve. Le dijimos al Alcalde que los libreros ya teníamos una propuesta, y se la hicimos saber. Nos pidió que hiciéramos la propuesta de forma oficial , y con el tiempo, teniendo en cuenta su perfil, el equipo de gobierno decidió tener una cronista oficial, con la satisfacción que tal nombramiento nos producía.
Enumerar a cuantas personas tenemos que agradecer todo cuanto hicieron para que Libroviedo llegara a tener el prestigio que le es propio no se puede reflejar por falta de espacio. Pero sí es de obligado cumplimiento mencionar a doña Carmen Ruiz-Tilve por su apoyo permanente a la labor que hacíamos los libreros y su disposición a colaborar con nosotros en cuantas tareas le demandábamos. Está en mi recuerdo de forma perenne el pregón de inauguración de la primera edición de Libroviedo a cargo de doña Carmen, que en el mismo paseo de los Álamos leía a viva voz un pregón hecho con todo rigor y mucho cariño y que los allí reunidos, no pudimos entender nada, pues lo impedía el ruido del tráfico en aquel momento, con la frustración y disgusto de nuestra invitada.
Estuvo siempre en nuestro pensamiento hacerle a Carmen un reconocimiento público, que, aunque organizado por los libreros, fuera abierto a todas las entidades y amigos, que son muchos.
Llegado este momento, quiero sugerir a los dirigentes actuales de Libroviedo, por su gran capacidad organizativa, que retomen la idea para llevar a buen fin ese reconocimiento que sin ninguna duda ya toca.
Qué duda cabe de que estoy a vuestra entera disposición, como ya sabéis, para ayudar en cuantas tareas os pueda ser útil.
Pedro García Alonso, Presidente de los Libreros de Asturias, Oviedo
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