Aviso a navegantes(pensiones)
La actual situación del país no dejar lugar a muchas frivolidades.
Voy a intentar no frivolizar, porque como se dice no está el horno para bollos. Pero lo que si da lugar la situación es para que aparezcan muchos aprendices del pasteleo. Esos aprendices que les gusta jugar con la harina ajena, y que quieren usar sus recetas para pastelear con el bienestar ajeno. Veamos esas recetas que salvarán el mundo de sus desaguisados: rebajar las pensiones a sus perceptores, y una vez rebajadas, que paguen el 40% de los medicamentos. Bravo por tan espléndidas ideas. Señor Quirós, tiene usted una vecina muy generosa o es usted un magnifico cuentacuentos. Y no soy su vecino, ni quisiera serlo, por razones que me callo porque soy educado o por lo menos trato de serlo aunque tengo la sangre que bulle por mis venas. Creo tener el derecho de demostrar mi enfado; por las noticias que aparecen cada dos por tres en los medios de comunicación, induciendo a que los pensionistas renunciemos a un derecho. Digo derecho, porque fuera quien fuese, nos lo aplicó y con el paso de los años se ha tornado patrimonio de los jubilados y pensionistas. Hay una realidad que nadie puede negar: quien es pensionista, lo es por una razón válida ya que la Seguridad Social no regala nada, bien al contrario, muchas veces se comporta como una madrastra. Pues bien, cuando uno está peor de salud, es decir, cuando su enfermedad ya es crónica y no tiene otra solución que tomar medicación para el resto de su vida, vienen estos pseudointelectuales que encima se dicen socialistas, y dicen ¡Eureka que idea más edificante: los pensionistas o jubilados que tengan una pensión más digna que paguen su medicación!
¡Vamos, señores! dígannos en que plaza pública quieren poner el cadalso para guillotinar al pensionista. Será que los pensionistas no pagamos hipotecas, alquileres, el IBI, la subida de la electricidad, la avaricia de la banca, y la voracidad y los desfalcos del neo capitalismo, etc. Bien es verdad que es más fácil avasallar al más débil y no ir contra las grandes empresas farmacéuticas que se forran a costa de nuestra mala salud. Claro está que los enfermos no podemos hacer huelga de enfermedades, porque si fuera así, otro gallo cantaría. Pero sí podemos votar, no lo olviden ¡Pensionistas y jubilados somos un potente ejército! Que durante una larga vida de trabajo hemos sido espléndidos pagando nuestra cota para que otros cobraran sus pensiones. Ahora bien, me pregunto: ¿dónde están las asociaciones y federaciones de sindicatos de jubilados y pensionistas que deberían saltar sobre eso ideólogos con buenos sueldos y seguros privados? Esos políticos que se ponen siempre de acuerdo para subirse los sueldos, y ahora se quieren poner de acuerdo para rebajar a los pensionistas al nivel de la calle.
¡Señores! con la minusvalía de los pensionistas no se juega
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