Al alcalde de Cangas de Onís
Se dice que la libertad de uno comienza cuando se respeta la del contrario, yo lo creo así, pero hay personas que no lo entienden. Esto ocurre en Cangas de Onís, y concretamente con un funcionario municipal, el cual se siente poseído por la razón y creo que debe pensar que sus métodos presuntamente antidemocráticos son la esencia de la misma.
Su excesivo celo, con algunas personas, entre las que me encuentro, hace que me sienta presuntamente «vigilado y perseguido».
El método más usual es el de la «denuncia persistente», y no sólo ante el Ayuntamiento, o Juzgado, sino a cualquier institución, como consejerías, ministerios, parque nacional, etcétera.
Señor alcalde, pongo a su disposición todos los datos que poseo para que tome las medidas oportunas, con el único objetivo de frenar la ya citada presunta «persecución».
Los miembros y simpatizantes de la asociación Tabardín, y yo en calidad de presidente, nos «llevamos la peor parte».
Resulta «bochornoso» que se utilice la condición de agente de la autoridad para tales menesteres, cuando su misión es la de prevenir actos delictivos e investigar los ya cometidos, como el allanamiento de mi vivienda, ocurrido el 27 de febrero de este año por tres encapuchados. Por el bien de Cangas y sus vecinos, «juego limpio» o, lo que es lo mismo..., «profesionalidad».
Javier Con Fernández, Mestas de Con (Cangas de Onís)
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo