A la niña de Rajoy no la dejan decidir
La niña de Mariano ya es una mujer y sabe lo que significa, porque ha estado trabajando durante dos años; pero la empresa comenzó a tener pérdidas. Primero le redujeron la jornada y el sueldo. Por último se fue a la calle.
Ahora que se le acaba el paro, se encuentra con que no tiene derecho a ningún subsidio y tampoco encuentra trabajo, aunque tiene una licenciatura, cursos, seminarios, idiomas, etcétera... ¿Quién va a contratar a una mujer joven que está embarazada en el país del paro? Y eso que su familia hizo una reforma hace poco, para que chicas como ella tengan trabajo, aunque las condiciones sean de esclavitud.
Pero ella piensa: ¿que ha pasado para que lo que consideraba unos derechos que estaban ahí desde los tiempos de su mami, tías, etcétera, los borren de un plumazo.
Ahora que ella los necesita, su tito Alberto va y se los quita.
Porque, claro, ella no ha dicho en casa que está embarazada y que su noviete está en el paro como ella; y para colmo ha ido al ginecólogo y le han visto malformaciones en la ecografía. Se ha dado cuenta de que está sola, que su familia sólo defiende a los suyos que no se salen del redil. A su clase.
Pero ella siempre ha ido por libre y se encuentra en tierra de nadie. Ante esta situación, cree que lo mejor es abortar, pero, claro, no podrá hacerlo, porque su casta ha decidido que las mujeres no tienen derecho a decidir sobre su cuerpo y que están condenadas por las leyes del PP y de la Iglesia a sufrir.
Que siempre serán ciudadanas de segunda en manos de la derecha más reaccionaria y carca de este país.
Una condena a cadena perpetua, porque al sufrimiento por no poder decidir hay que añadirle el sufrimiento de ese nuevo ser.
Y el hachazo que supondrán los recortes de la ley de Dependencia. ¿Con qué medios contará para atender a esta criatura? Ya que los suyos han decidido que hay que dar otra vuelta de torniquete y la ley de la Dependencia es un abuso, así que quien la necesite que la pague como ellos. Porque para eso hay clases. Y mientras tanto la niña se pregunta en qué familia le tocó nacer. Porque las mujeres siempre han estado y estarán para luchar por sus derechos, y para mantenerlos en el siglo XXI. Por eso, a partir de ahora, nosotras somos su familia.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo