Una isla de prosperidad rodeada de un mar de miseria
En efecto el gobierno de Asturias está paralizado. El Sr. Alberto Menéndez en un artículo del día 26, le define muy apropiadamente en estado de hibernación, miedo y falto de iniciativa. Muy acertadamente no les justifica ni en esta situación económica. Añadiría que en tales circunstancias es cuando se necesita unos gobernantes valientes, capaces de rebuscar salidas a esta crisis, enfrentarse a la dificultad con imaginación, aportando ideas, iniciativas, que se esfuercen en consensuar, se reúnan día y noche en espera de que su cerebro les dé para algo más que rucar sueldo y dietas. Y si después de unos días, siguen tan incapaces, la dimisión inmediata les haría hombres de honor.
No pueden seguir Sr. Fernández esperando que todo mejore por sí solo, ustedes están para cuando vienen mal dadas, verles en su esplendor justificar el porqué se presentaron a un cargo de tal responsabilidad donde les vale esconderse, esperar que el maná caiga del cielo y les resuelva los problemas hay que dar soluciones, verles trabajar, sentirles esforzarse, que los ciudadanos les oigan explicarse de cuanto están haciendo por los parados, los desahuciados, los que ya no tienen ni para comer, etc. A la crisis hay que ganarle la batalla entre todos, y entre todos repartir sacrificios y que nadie pueda sentirse en un País del tercer mundo. La miseria es difícil de gestionarla, por ello no dejen abandonados a familias enteras sin poder comer. Si no interpretan que ese camino nos lleva a delincuencia, mendicidad y desvergüenza, ¡váyanse ya! De lo contrario empiecen a buscar un salario mínimo para todas aquellas familias que están imposibilitadas de encontrar un medio de subsistir ¿Qué haría usted si sus hijos no tuvieran que comer? ¿Cuándo serán nuestras consciencias lo suficientemente sensibles como para impedir la miseria humana antes de que nos avenga? E. Roosevelt.
Para ello claro que hay que buscar dinero, ahí es donde viene la imaginación del buen gobernante: lucha sin cuartel contra el fraude fiscal. Hay que inspeccionar a todos aquellos que defraudan al fisco, y cuando la Ley les imponga un castigo ejemplar, verá Sr. Fernández, como el resto de insolidarios delincuentes, se avienen a razones y empiezan a pagar impuesto como todo hijo de vecino. La economía sumergida es una de las razones por las que este País no es capaz de generar ingresos suficientes.
Y si sigue pensando Sr. Fernández en recortar más, los ciudadanos ya no les consentirán que sigan riéndose de ellos, solo queda la parcela que les toca muy a dentro a ustedes, y no por repetido es menos necesario: Eliminar 2/3 de los políticos electos, el 100% de los enchufados que fueron sembrando PP y PSOE conformando una administración paralela al funcionariado que hace inviable poder sostenerla económicamente. Allí metieron familiares, amiguetes y entre ustedes mismos, de asesores, consejeros, etc. cargos de confianza de libre designación que ganan sueldos inmensos y que hacen peligrar a los que ganaron su plaza en oposición. Ustedes se convirtieron en un problema ¡no veo por ningún sitio, que tengan la solución! Les siento incapaces, ineptos a más no poder.
Sr. Fernández, no se puede vivir por mucho tiempo en una isla de prosperidad, cuando estamos rodeados de un mar de miseria. ¿Tendrá la cara dura de mantenerse en el cargo como Rajoy, viendo como se hunde su Isla? ¡Pónganse a trabajar duro! pidan ayuda a todo hijo de vecino capaz, consensuen entre partidos, sindicatos, empresarios. Dejen de pelearse por intereses particulares ¿no se dan cuenta que miles de personas esperan algo más de ustedes? ¡Venga, Presidente, demos esperanza a quien la perdió! Asturias necesita de todos.
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