Rafael Meré Pando, una pasión por la gaita

Con curiosidad leo, día a día, la para muchos casi inadvertida sección de la última de LA NUEVA ESPAÑA titulada «Efemérides». Con sorpresa y con agrado, leí días pasados la correspondiente al 24 de octubre 1895: «Nace en Valdebárcena (Villaviciosa) Rafael Meré, estudioso de la gaita». Como tenía a mano el Libro de Bautizados de esa parroquia, por ser párroco de la misma, busqué su partida de bautismo y, al folio 16 vuelto, me encontré con la partida bautismal buscada, que no me resisto a dejar sin transcribir:

«Ternín. Rafael Meré Pando. En la Iglesia Parroquial de San Andrés de Valdebárcena, en el Concejo y Arciprestazgo de Villaviciosa, hoy día once de octubre de 1894, yo el infrascrito cura propio de esta, bauticé solemnemente un niño que nació, el día anterior, hora de las dos de la mañana. Se le puso por nombre Rafael. Era hijo legítimo de José Meré (Casielles) y Aureliana Pando (González), vecinos de Ternín y naturales él de Peón en este Concejo y ella de Ternín, hijuela que fue de San Pedro Ambás. Sus abuelos paternos, José (Meré Ceñal) y Joaquina Casielles (Álvarez, natural de Candanal), ya difunta y naturales del dicho Peón. Maternos, Tomás (Pando González), ya difunto, y Severa González (Pando) naturales de Amandi. Fueron sus padrinos D. Rafael Sierra, a quien advertí el parentesco espiritual y demás obligaciones que por él contrajo y Doña Aurina Díaz, la que no tocó. Y lo firmo José Rodríguez Carbajal».

Fue grande la satisfacción, cuando siguiendo con mi curiosidad, me encontré con otros tres hermanos de Rafael: José Ramón, nacido en Ternín, el 13 de enero de 1893, el primero de los hermanos; Rogelio, nacido el 27 de abril de 1896, también en Ternín, y Veneranda, nacida en Condarco, el 17 de enero de 1900. Leídas las diferentes partidas me fue posible ofrecer algunos datos complementarios, que, en la transcripción de la de Rafael, recojo entre paréntesis. La lectura atenta me permitió corregir la fecha que recoge la efeméride, atribuyendo a 24 de octubre de 1895, error originado en la Gran Enciclopedia Asturiana.

Mi cariño hacia el pueblo de Ternín viene de los tiempos en que, con la colaboración de los vecinos de este pequeño núcleo de la parroquia de San Andrés de Valdebárcena, conseguí llevar a cabo la rehabilitación y restauración de su antigua iglesia, hoy capilla, de San Martín de Ternín, que había venido a parar a completa ruina, al perder la parroquialidad, que, con carácter de hijuela de San Pedro Ambás, tuvo hasta el año 1892, en que quedó suprimida en la reforma parroquial del obispo don Fray Ramón Martínez Vigil. En un opúsculo que entonces publiqué para realzar y dejar constancia de la inauguración llevada a cabo por el arzobispo don Gabino Díaz Merchán el 26 de agosto de 1989, folleto que lleva por título «La antigua iglesia, hoy capilla, de San Martín de Ternín. Memoria de su restauración realizada por los vecinos» (Oviedo, 1989), en la pagina 12 dediqué un apartado a «Personas notables de Ternín», en el que, por no haberlo descubierto aún, no pude mencionar a don Rafael Meré Pando. Por ello, me siento sumamente complacido de poder dedicarle en el presente estas líneas que vienen a subsanar su ausencia entonces en aquella sucinta reseña.

«Don Rafael Meré Pando, estudioso de la gaita».

Nació nuestro feligrés de Valdebárcena en el pueblo de Ternín, como reza su asiento en el Libro de Bautizados de esta parroquia villaviciosina. Realizó los primeros estudios en la escuela que, en el cabildo de la iglesia, regentaba un maestro babiano. Probablemente se pensaba en que realizara la segunda enseñanza en el Colegio-Seminario de Valdediós.

No obstante, los derroteros de su vida dieron un vuelco notable. A la temprana edad de 10 años, quizá reclamado por algún pariente ya emigrado, según declaraciones del propio Rafael al diario «El Comercio», marchó a Hispanoamérica, primero a la República Argentina y después a Cuba, de donde pasó a Estados Unidos, donde permaneció por espacio de dieciocho años. De allí volvió a Europa, instalándose durante cuatro años en Francia. Atraído por la oferta de la Editorial Carroggio, retornó sucesivamente a Madrid, Barcelona y San Sebastián, ejerciendo las funciones de agente comercial de la editorial aludida.

Sus años en el extranjero le familiarizaron con el inglés y el francés, que hablaba con fluidez, siendo capaz también de expresarse en portugués y catalán. Fue un autodidacta, de vasta cultura humanística, aunque marcada por la autoformación.

Los azares de su vida inquieta le hicieron recalar en Gijón, donde vivió sucesivamente en las calles Munuza, Seis de Agosto y General Suárez Valdés. Entre otras instituciones culturales, se vinculó al Esperantista Club de Gijón, con grande y fácil progreso que le facilitaba su amplio conocimiento de los idiomas neolatinos y de la lengua inglesa.

Buena parte de su vida la dedicó a hacer acopio de bibliografía para una investigación de altos vuelos sobre la historia y la geografía de la gaita. De niño había escuchado en una ocasión en La Encrucijada de Torazo al famoso Gaitero de Libardón, don Ramón García Tuero, y ello marcó tan profunda huella en su vida que, aunque no fuera capaz de practicar ese instrumento de raigambre tan asturiana, sin embargo le llevó a embarcarse en la gran tarea de estudiarla a fondo.

En el recién creado Museo del Pueblo de Asturias, el Ayuntamiento de Gijón en el año 1972 nombró a Meré Pando conservador del Museo Internacional de la Gaita, cargo que desempeñó hasta su fallecimiento, el 5 de marzo de 1978.

Su tarea investigadora la orientó a la recogida de materiales y noticias, con destino a publicación de una Historia Universal de la Música, que dejó inconclusa. Sí, en cambio, publicó más de una veintena de trabajos, de los que queremos destacar algunos: «Las gaitas de Rusia», «La gaita instrumento del diablo en los cuadros de Jerónimo Bosch», «Canciones y danzas de Asturias al son de la gaita», «La gaita escocesa en Nueva Zelanda»; «La gaita en la musicoterapia empírica». En inglés publicó «The bagpipe in Asturias».

Sirvan estas líneas de emocionado recuerdo a un hijo ilustre de Ternín, en la parroquia de San Andrés de Valdebárcena, Rafael Meré Pando.