¿Quién es Olli Rehn, para seguir consintiéndolo?
Este Sr. sigue dirigiendo los asuntos económicos de la comisión Europea a pesar de que todos sus argumentos se vienen abajo, desde el momento que pasan los años y todas sus políticas económicas de ajustes, recortes, subidas de impuestos, bajadas de salarios y austeridad; nos está llevando a la ruina colectiva en España. Pero por si fuera verdad que los españoles fuéramos como los Alemanes y Finlandeses nos ven: juerguistas, vagos, pobres, ociosos y corruptos; también se viene abajo esta tesis cargada de envidia fina, ya que Italia, Portugal, Grecia e Irlanda donde también siguen a rajatabla las mismas políticas económicas erradas, están sufriendo la recesión como nosotros, sin apreciar una sola razón de peso para seguir acatando las directrices de estos personajes ineptos que les importamos un rábano.
Si reparan un poco, los del norte de Europa quisieran ser como nosotros, pero su entorno sombrío y frio no da para más, a pesar de ser altos, rubios y ricos siempre están deseando mejorar la especie. Nosotros en cambio, les causamos envidia por ser felices incluso con barriga y calvos, sin desear ser distintos y diferentes. Esta sensación de saber vivir que tenemos los españoles y que da apetencia al resto, viene marcado por el sol, el clima y este bello País que emana alegría y vida.
Por ello Sr. Rajoy, deje de aplicar las políticas de estos aburridos norteños, que disfrutan viéndonos sufrir. Si no podemos pagar nuestra deuda, lo dejaremos para más adelante cuando salgamos de la recesión, ya que ellos jamás serán solidarios. Si tenemos que salir del Euro salgamos, total para llevar el camino que nos está marcando Merkel, directos al precipicio; mejor lo hacemos solos, sin malas compañías. De peores momentos hemos salimos para que estos alemanes y Finlandeses vengan ahora a mandarnos, insultarnos y arruinarnos.
¡Una cosa, alemanes! Esta es una raza trabajadora, nada de vagos; corruptos al mismo nivel que ustedes; lo de llamarnos pobres es lo que más daño hace, ya que lo somos cada día más desde que les entregamos la soberanía y nos marcan las políticas económicas ustedes. Lo cual, está claro Sr. Rajoy, debe huir de éstos como de la peste. Para tener socios así, mejor nos las arreglemos solitos.
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