Viaje de estudios, alumna discapacitada
Hace unas semanas el Instituto Ería de Oviedo realizó el viaje de estudios de primero de Bachiller: más de cincuenta alumnos, incluida su compañera Noelia, discapacitada de máximo grado y con la ayuda de una cuidadora para ella.
Los obstáculos de accesibilidad fueron bastantes en las ciudades centroeuropeas que visitamos, pero el comportamiento de sus compañeros en salvar, uno tras otro, todos los obstáculos fue inmejorable: sobraban brazos para cogerla en cuello y salvar escalones, empujaban la silla de ruedas y llevándola a comer y dándole la comida e integrándola en el grupo como uno más. Los compañeros conocían a Noelia, que lleva cinco cursos en el Instituto, pero sólo la conocían de vista, ya que Noelia no sale a los recreos para poder integrarse, está en las clases y de ahí se va a un cuarto con sus cinco compañeros discapacitados en la segunda planta, la integración en la Ería no existe. La integración no es estar en un aula rodeada de alumnos y ya está.
A los alumnos discapacitados del IES Ería se les vulnera los derechos más básicos de una persona discapacitada, «la integración», a pesar de que la propia Consejería de Educación con los departamentos encargados del seguimientos de estos alumnos discapacitados, responsables de medios, recursos, apoyos, «integración», en varios informes dirigidos al «director» sobre la situación de estos alumnos, certifican que estos alumnos al estar en la segunda planta «no pueden bajar al recreo a socializarse con sus compañeros», clarísima vulneración del derecho de integración e igualdad y una clara discriminación, e indican en el informe «al director» un lugar donde podrían ser ubicados de la planta baja y manifiestan en el informe que «ese lugar facilitaría la evacuación de estos alumnos en caso de necesidad». Y yo digo, ¿cómo los evacuan desde la segunda planta?
Los simulacros que se realizan con los discapacitados es de juzgado de guardia, diez minutos antes del simulacro, son bajados uno a uno en «ascensor» (elemento muy utilizado en los incendios y que sirve para evacuar a todo aquel que quiera arriesgar su vida), reitero, los bajan desde la segunda planta hasta la planta baja, los reúnen a los seis, como un «rebañito», apartados, suena la campana y se inicia el simulacro para el resto de alumnado. Desde el año 2010 está denunciado que los alumnos discapacitados en la Ería no tienen vías de escape posible, y en este primer informe de la propia Consejería se dice que el hecho de estar abajo «facilitaría su evacuación». Si mañana pasa algo, ¿quién se responsabiliza de esto? ¿La señora Consejera de Educación? ¿El director?...
El otro informe del servicio de Orientación, desde el mismo centro, se le dice al «director» que «tome las medidas oportunas que faciliten la inclusión de este alumnado en la vida del centro» (casi nada) y se hace referencia también a la intervención de la asociación ASPAYM (Asociación de Lesionados Medulares y Grandes Discapacitados), invitada por la Consejería de Educación para que haga un informe y asesoramiento para la integración de los alumnos discapacitados en el centro, y en este otro informe se dice que el lugar donde se encuentran estos discapacitados «apenas tiene ventilación, es muy triste y deprimente, casi carcelario; los alumnos que están ahí apenas tienen relación con nadie».
¿Cómo es posible que un simple cambio de un cuarto de un piso a otro, con los beneficios para los alumnos discapacitados expresado en informes de la propia Consejería, tengamos que intervenir tantas personas a favor de estos alumnos (orientadora del centro, orientadora específica del centro y su jefa; servicio de alumnado, orientación y participación educativa, asociación ASPAYM, Procuradora General del Principado, dos denuncias desde julio 2012 vía registro de Consejería y que un director se empeñe en hacer caso omiso a sus «jefes» y no facilite la integración de estos alumnos, siendo este director el único culpable de esta sanción?
¿Qué hace la Inspección educativa que ha sido informada de estos hechos?, se verá...
Mil gracias y nota de sobresaliente a los compañeros y profesores del viaje de estudios, que no discriminaron a su compañera discapacitada y salvaron con ella todos los obstáculos, y en una semana fueron capaces de integrar a su compañera demostrando que «sí se puede» integrar a estos alumnos donde sea (viaje de estudios, instituto, etcétera) a pesar del director, que debería hacerse un examen de conciencia.
Gracias a unos cuantos profesionales del IES Ería por dar la cara día a día para apoyar a estos alumnos para que se puedan sentir como «uno más».
¿Por qué no sales al recreo, Noelia?
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo