Encantamiento sexual
Una amplia encrucijada de predisposiciones se nos presentan cuando la indomable libido se apodera de nuestro impulso sexual. Nos aborda con su peculiar mimetismo, para encantar, durante el cortejo sexual, a la persona elegida. Como buenos imitadores que somos, bailamos al son de nuestro apetito sexual, ofuscados por la culminación del clímax. Somos capaces de camuflar a nuestra ineludible función primigenia en un atractivo traje de fiesta, para convertirnos en los protagonistas de una desenfrenada noche de placer y lujuria. Lo que ocurre es que, por más que queramos catalogar a nuestro instinto sexual en una categoría personalizada e incomparable, el desenlace final, nos descubre la realidad rectilínea de nuestra función; bien camuflada bajo la apariencia del aguerrido encantamiento sexual.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo