La Nueva España » Cartas de los lectores » Los hombres que no amaban los árboles

Los hombres que no amaban los árboles

25 de Julio del 2013 - José Ordóñez y Fal (Lieres)

Ya no volverán a dar sombra.

Siempre recordaré la imagen cromática que en días de estío hacían prodigar sombras multiformes seis fresnos, y un abeto, y un ciprés.

Vivían en Lieres, junto a la iglesia, desde hace más de tres décadas.

Vivían. Tiempo pasado. Porque a principios del mes de junio sufren una tala a media altura, lo que muchos llaman «desmochar».

Tras esta barbaridad cometida fuera del ciclo natural, ahora se talan a un metro mal contado. Imagino que dejar el tallo a esa altura será para no doblar la espalda.

Comienzo a no reconocer bien este pueblo. La indiferencia de quienes atacan el patrimonio que nos rodea es algo preocupante, o debería...

No sé quiénes son los responsables. No me importa. Porque a mí me importaban los árboles, aquellos que protegían y daban sombra. Y vida. En silencio.

La afición de quebrar y romper de quienes se asemejan a la polilla queda patente en estos actos.

Quiero condenar esta fechoría públicamente, y pido respeto para los bienes que forman parte del paisaje de nuestros pueblos.

Los artistas de esta maniobra pasarán con indiferencia junto al otrora conjunto de árboles. Pero serán cómplices de esa maniobra. Son unos tristes. Serán unos tristes.

Hay dos tejos centenarios junto al mismo lugar, y también generan broza, ramas, hojas secas, cortezas... tal vez deberían ser tratados por igual, siguiendo la tala de sus compañeros...

A fin de cuentas, estoy convencido de que muchas veces los árboles son una pesadilla para algunos.

Ejemplo deberían de tomar del maderista de la parroquia, Eliseo, quien con la sabiduría ancestral permite un crecimiento sostenible de nuestro entorno.

Ojalá sea ésta la última página lamentable de la intrahistoria de mi pueblo.

Cartas

Número de cartas: 46054

Número de cartas en Septiembre: 158

Tribunas

Número de tribunas: 2086

Número de tribunas en Septiembre: 8

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador