Un caso oscuro
Mestas de Con, Cangas de Onís, la madrugada del 26 de febrero de 2012, tres encapuchados allanan mi vivienda, derribando la puerta con un tablón, y destruyendo todo cuanto encuentran en la parte baja de la casa, e intentando agredirme, yo me encontraba en la primera planta.
No se trataba de un robo, sino de una respuesta «mafiosa» para intentar intimidarme.
El caso lo denuncié a la Guardia Civil, sin que hasta la fecha tenga noticia alguna del asunto.
Tres sospechosos pasaron por las dependencias de la Benemérita, pero sin ningún resultado. En el escrito enviado al Juzgado, el instituto armado relata, de forma escueta, que los sospechosos tienen coartada, y que ésta ha sido comprobada.
Sin embargo, dos testigos la desmontan por completo, ya que vieron a los sospechosos en lugares diferentes.
Presenté escrito-denuncia ante la Comandancia de la Guardia Civil de Gijón, pidiendo se actuara y se interrogara a los testigos, pero todo, en vano; es más, la respuesta de esta institución parece ir dirigida a un niño de 4 años, y no a una persona adulta. Igualmente, me dirigí por escrito a la Delegación del Gobierno, pero, como no podía ser de otra forma, pasaron la «pelota» a la Benemérita.
Una vez me doy cuenta de este círculo vicioso, presento la correspondiente denuncia en el Ministerio del Interior; lo hice en dos ocasiones, la primera no me contestaron, y la segunda, mucho mejor que no lo hubieran hecho, con esto lo digo todo. A fecha de hoy, los testigos siguen deseando declarar, para así «poder hacer justicia», pero el sistema los sigue ignorando. El Defensor del Pueblo ya tiene en su haber un detallado dossier de todo lo ocurrido en este largo tiempo, y un profesional del mundo del derecho está estudiando el tema, con objeto de denunciarlo donde proceda, ya que actos de este tipo no pueden quedar impunes.
Por mi parte, estoy dispuesto a llegar hasta el final y a realizar cuantos actos de protesta sean necesarios.
Como dije al principio, fue una «actuación mafiosa», anterior a la misma sufrí amenazas, injurias, pintadas, etcétera, todo denunciado, pero nada de nada.
Es la respuesta a mis denuncias sobre corrupción, caciquismo e irregularidades, presuntamente ocurridas en el Consistorio de la que fuera primera capital de España, las cuales realicé durante varios años, y que, por supuesto, seguiré realizando.
Pero hay dos preguntas que quiero dejar en el aire, para que los ciudadanos reflexionen sobre las mismas. Yo, desgraciadamente, llevo mucho tiempo dando vueltas y más vueltas, y como no me considero ningún ingenuo, ya sé la respuesta. ¿Por qué no se detiene a los delincuentes? ¿Pertenecen los mismos a «familias honorables», pudiendo el escándalo salpicar a políticos e instituciones?
Ésta es la España que tenemos, donde los ciudadanos cada vez pintamos menos, somos simples marionetas en manos del sistema, pero conmigo, que no cuenten, creo que todavía hay personas íntegras, y a esos ciudadanos es a quienes envío este escrito.
Javier Con Fernández, Mestas de Con (Cangas de Onís)
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo