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Competir bajando salarios igual a ruina colectiva

12 de Noviembre del 2013 - José Viñas García (Oviedo)

Todos los gobiernos y empresas, desde hace años, vienen aplicando una máxima equivocada y peligrosísima, que para tener éxito cualquier empresa, deben ser más competitivos que el resto, pero ¿dónde está el límite de esa competitividad?

Si solo pretenden competir en precios, bajando salarios y despidiendo trabajadores, tenemos un gran problema a la vista, y que nos mandará al abismo sin solución. Ya que el resultado será el cierre de la empresa sin vuelta atrás; ya que siempre aparecerá otra empresa por cualquier lugar del mundo que saque ese mismo producto a menor coste, lo cual hicimos un pan con unas hostias. Ya que la bajada de salarios, tiene un límite, y este no es otro, que la dignidad de las personas. Aunque en la actualidad las hipotecas y una mínima esperanza que les queda que todo mejore, les contrae, y les hacen aceptar condiciones de esclavitud; algún día se rebelaran ¡dirán basta! La vida hay que honrarla, en ocasiones es preferible morir de pie, que vivir de rodillas, y ese día llegará sin poder evitarlo, gracias a que ustedes políticos incompetentes están solo a lo suyo.

¿Tenemos mucho margen de maniobra en estos momentos, para bajar sueldos y exportar más y más barato que otros? Creo que no, que solo nos queda pagar por producir, para hacer competitiva nuestra cobarde sumisión ante el poder y el dinero.

Solo se debería competir con calidad, inventiva, investigación, innovación; en una palabra, con imaginación; pero como nuestros gobernantes no la tienen, sólo saben competir con recortes: disminuyendo salario y personal. Si a esto añadimos que los impresentables suben impuestos, congelan la inversión y el gasto público, sobre todo en educación, que es la clave del desarrollo I+D+i, despiden a funcionarios, mineros, etcétera, la gente se asusta y acaba ahorrando, la demanda privada también se contrae, los ciudadanos gastan menos por si acaso; el consumo se resiente, la empresas cierran, despiden trabajadores, no invierten, caen los beneficios empresariales y con ellos la recaudación de impuestos, por lo tanto aumenta el déficit, y son necesarios nuevos recortes. ¿Así hasta el infinito? Lo siento, siento que estamos en manos de perfectos ineptos.

La vida es riesgo, y por lo tanto en tiempos difíciles hay que arriesgar; desde el Estado hasta el último ciudadano, no podemos dejar pasar el tiempo esperando que estos que dicen que hay que bajar salarios para competir sigan ganando millones ¡serán miserables! Tenemos que consumir quienes podamos hacerlo, los empresarios que tengan dos empleados deben colocar a tres, y, si hay que apretarse el cinturón, los políticos tienen que ser los primeros en dar ejemplo: eliminar toda esa administración paralela que han creado PP y PSOE a lo largo del tiempo, con asesores, consejeros, cargos de confianza, etcétera colocados todos a dedo con grandes sueldos. Luego hacer incompatible más de un sueldo a quien ocupe un cargo público. Nos estamos jugando el hundirnos todos o salvarnos siendo solidarios. ¿De qué nos sirve ahorrar unos euros si mañana caeremos en el pozo donde todos viviremos en una sociedad insegura y pobre? Consuman, emprendan y arriesguen, o lo pagaremos muy caro. Y qué decir de quien defrauda al fisco: es hora de empezar a aportar y aflorar su insolidaria posición, porque quizá la ley empiece a caerles con crudeza en seguida. Infinidad de profesiones de bien en consultas privadas campan a sus anchas defraudando, cuídense de seguir haciéndolo, los ciudadanos estamos hasta las trancas de ser los mismos los que aportemos siempre.

Esto es el inicio de repartirse miseria, la que nos dejan estos políticos ineptos y apoltronados que tenemos.

Si a nuestros hijos les situamos un presente incierto y desolador; el futuro que les espera como no paremos esta dinámica, será para morirnos avergonzados de haber existido, donde será quizás la primera vez que los padres dejan una vida peor a sus hijos, que la que ellos han tenido. Tenemos que parar este círculo vicioso del canibalismo más idiota jamás visto.

Si en efecto es necesario rebajarse a tal guisa para competir, señores Políticos ¿Por qué no empiezan por sueldo, y lo colocan en mil euros? Simplemente para competir, apra que ustedes os salgan más baratos. Es sufragado por nuestros impuestos, a los que ustedes quieren convertir en esclavos de un sistema, pero al que ustedes no están dispuestos a entrar. Solo desean la miseria para los demás. ¡Ya les vale! Están llevando a los ciudadanos a límites de máximo aguante.

¡Que sensibilidad más perversa es querer sacar al País de la crisis a consta de los más débiles! mientras ustedes no se aplican ni una sola de esas recetas. ¡Se me olvidaba! Sí para devolver nuestra deuda, tenemos que pagar semejante precio todos los españoles, negocien hasta la extenuación otras formas más favorables: alargar plazos, menor interés, demoras, cancelaciones, Quitas, etc. pero no sigan hundiendo la economía del País, señores políticos.

Decía el filósofo Emilio Lledó, que le inquieta dejar la política "en manos de oportunistas e indecentes" Pues eso tenemos.

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