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Las bicis en las aceras de Gijón

28 de Junio del 2009 - Alvaro Rey Miranda (Gijón)

Después de escuchar a una agente de la Policía Local de Gijón, que tiene orden de no hacer nada cuando vea a un ciclista circular por la acera, mi sospecha ya dejó de serlo. La bicicleta es un vehículo y su uso se reduce a las calzadas y los carriles bici, no a las aceras en las que los paseantes no tienen que ir permanentemente preocupados por si apareciera un ciclista a la vuelta de la esquina, o cuando vayan a salir del portal de su casa. Especialmente: niños pequeños, ancianos o personas con escasa movilidad. Tienen todo el derecho del mundo a pasear tranquilamente, de la misma manera que el ciclista tiene todo el deber a circular por la calzada o el carril bici cuando existe.

Si nos vamos a los caminos y las sendas de la zona rural, véase la del Tragamón y la de La Camocha, allí como es de uso compartido, el peligro está en los que se creen que es una pista de velocidad; para eso están la de Las Mestas y las carreteras.

Tanto en un sitio como en otro, la realidad es que un día va a suceder una desgracia y ¿quién será responsable? ¿Será el concejal en temas de tráfico o policía local? La normativa nadie se la puede saltar, por supuesto nuestro gobierno local no puede desentenderse de este tema porque no se trata de tolerancia ni alternativa al coche, simplemente está incumpliendo la ley y lo sabe.

Cuando quieran poner carriles bici, que lo hagan debidamente, es decir, separados (no con rayas en el suelo que se borran rápido) pintados y señalizados. De algún modo homologados y no de cualquier manera. Todos queremos compartir espacios y convivir pero con orden y sabiendo en todo momento hasta dónde debemos llegar sin molestar al otro.

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