Periodismo vs. Publicidad
Se ha formado un gran revuelo mediático, tras la aparición de la campaña Hazte extranjero, que no es sino parte de una campaña de Campofrío, en clave de humor.
Me sorprende que cuando se trata de publicidad, campañas o estrategias para la venta, el público se muestre especialmente sensible por estos mensajes, y, en cambio en materia de periodismo, no mantenga la misma actitud.
Si hay libertad de expresión en el periodismo, considero que debería haberla también en publicidad.
Todas las formas de comunicación en masa conllevan una filosofía de vida. Desde el viñetista de un periódico, columnista, o el creador de un anuncio publicitario, se crean y difunden unos valores y unas ideas.
Necesitamos tener una mente más abierta, y discernir qué mensajes escoger y cuales desechar y si la información nos parece inapropiada, claro está, denunciarla al departamento correspondiente.
Pero lo que no es aceptable es considerar que el periodismo es veraz y bueno per sé, y que la publicidad por lo contrario, mala, engañosa e irrespetuosa. Que los primeros son los adalides de la libertad y, la segunda, su hermana perversa.
Ambas corresponden al ámbito de la información y, como siempre, su uso dependerá del nivel de juicio, responsabilidad y buen hacer de su autor.
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