El Hospital de Cangas del Narcea y los 84 cm.

Antes de leer esta carta les pido un ejercicio práctico: cojan algo con que medir y vayan a su cama y calculen una distancia al suelo de 84 c., vean a donde tendrían que subirse si esa fuese la altura desde el suelo a su cama, y la dificultad que eso les traería para poder acostarse.

Esto viene a cuento, porque esa es la altura que tienen las camillas del servicio de Urgencias del Hospital de Cangas del Narcea desde hace aprox. unos 15 años, con un escalón a 20 cm del suelo ( lo que deja la altura en 64 cm. aunque a muchos les cuesta también esta altura), y a la que tiene que subirse los pacientes que acuden a este servicio, como ustedes entenderán, en condiciones anormales, inconscientes o semiinconscientes, con enfermedades que no les permite hacer esfuerzos de esa magnitud, con patologías diversas que les impiden moverse, bien antiguas o que han motivado su llegada al servicio, etc., con el agravante de que ese esfuerzo deben de hacerlo varias veces durante su estancia, como por ejemplo para realizar pruebas de Rx..Resumiendo: más que camillas, son auténticos potros de tortura, tanto para los trabajadores que tenemos que ayudarles o subirles a puro huevo (lo que pudo incidir en que ya compañeros hayan tenido que jubilarse o pedir cambio a puntos compatibles que no requieran el esfuerzo que hay que hacer para subir los citados 84 cm entre dos personas o a lo sumo tres, a enfermos de pesos superiores a los 100 kg. ) como para los pacientes, que son los principales perjudicados de este material tan obsoleto y antiguo.

Todos tenemos en la familia a alguna persona impedida, bien por enfermedad o por la edad, un padre o un abuelo, o como en mi caso, una tatarabuela: imagínense ustedes tener que subirlos 84 cm. a peso muerto, como se suele decir, para poder acostarlos, para que el médico proceda a su exploración y todo el protocolo que se lleva a cabo en Urgencias.

Pues bien, para la Gerente del Hospital de Cangas del Narcea el cambio de estas 5 camillas tan antiguas por unas nuevas con elevador, que podrían dejar la altura en unos 30 cm. con lo que el esfuerzo para los trabajadores y los pacientes (verdadero leiv motiv de nuestro quehacer diario), sería mucho menor, con un beneficio del 1.000% en calidad de asistencia, NO ES IMPORTANTE NI PRIORITARIO, como bien nos ha respondido a una nota que le enviamos firmada por el personal de urgencias( ATS, AC, Celadores e incluso Técnicos de Rayos), cuando el coste sería mínimo en comparación con el presupuesto del Hospital, e incluso comparándolo con los gastos que se están llevando a cabo en los últimos tiempos en el Centro. ¡¡¡ Las hemos visto en internet por menos de 1.000 euros/unidad ¡!!... Incluso tiene el valor de decirnos, que si realizando ajustes fuera posible, una vez ejecutado el presupuesto se PODRÍA ABORDAR EL ASUNTO, como si esto fuese un capricho del personal de Urgencias.Cosas veredes, amigo Sancho, como diría Don Quijote.

También nos comenta en su respuesta que las prioridades de las compras de material se deciden teniendo en cuenta el criterio de los profesionales, pero no nos dice a que profesionales se refiere, si a los de moqueta y despacho, tan de moda últimamente, o a profesionales médicos y de que servicios y criterios se siguen.

A lo largo de estos años hemos visto la compra de todo tipo de material: desde tv, sillas, sofás, salitas enteras, camillas aparentemente carísimas que se pasaron los años olvidadas en el fondo de un pasillo, mesas, infinidad de ordenadores, etc. Etc., hasta este mismo año que, por ejemplo, se cambió varias veces de ubicación la Capilla, asunto que respeto profundamente, pero que en España, que es un estado laico según su Constitución, creo, que según las propias palabras de la Gerente del Hospital, se debería priorizar la importancia de las compras según las necesidades,?????, de otra manera, ya que no hay dinero para todo.

Yo que desgraciadamente he tenido un accidente laboral en estas fechas y me han atendido en Tineo, en Ibermutuamur, el enfermero, para curarme y vendarme el pie, subía y bajaba la camilla a su medida, lo que le facilitaba su trabajo en gran medida, a pesar de que yo me movía con relativa facilidadme comentó que en su empresa hace ya muchos años que todas las camillas se habían cambiado a hidráulicas . Eso me ha convencido aún más que es IMPRESCINDIBLE el cambio de las camillas de Urgencias de nuestro Hospital a la mayor brevedad posible, sobre todo, pensando en el confort de los pacientes.

Hoy, día 19, le hemos vuelto a enviar otra nota, para intentar hacerle ver lo necesario y barato que sería arreglar un tema tan importante para usuarios del Servicio de Urgencias y para los trabajadores, aunque quizás para ella no tengamos la consideración de profesionales, a pesar de colaborar en atender desde hace muchos años a decenas de pacientes todos los días del año, y padecer con ellos estos 84 centímetros malditos y que tanto daño les y nos hacen.