Rueda de prensa en un matadero
A principios de este año, los terroristas vascos que la «doctrina Parot» puso en libertad convocaron una rueda de prensa y el local escogido para ello fue un matadero. Creo que eran unos 65 los convocantes y sumaban entre todos 309 asesinatos. Unos asesinos, reunidos en un matadero, es significativo y dramático. Bueno, más bien de una criminalidad insultante. A los periodistas asistentes a este vergonzoso acto se les prohibió hacer pregunta alguna. De manera que de rueda de prensa, nada. Estos asesinos se limitaron a ser fotografiados y un portavoz a leer un comunicado también vergonzoso e indignante, un verdadero insulto a sus víctimas y familiares. El remate fue pedir la independencia de Euskadi. Pero de arrepentimiento y perdón por sus crímenes, ni una palabra, lo que les reprochó un joven periodista, valiente él, que les dijo que allí, sobre su mesa, estaban todas las personas por ellos asesinadas. El joven periodista, Caki Minues, fue expulsado del matadero, rueda de prensa de unos matones.
¿Cómo se permitió esta mal llamada rueda de prensa, convocada por todos esos criminales? Sencillamente, porque el ambiguo y desconcertante Rajoy, que no se sabe si va o viene, si sube o baja, sigue la solapada e indigna negociación con ETA, herencia de Zapatero. No hay otra explicación. Y de ahí su premura y rapidez en el cumplimiento de la repulsiva «doctrina Parot», que pudo recurrir o demorar su cumplimiento. Por cierto, que algo muy parecido al chivatazo en el «caso Faisán» se acaba de producir también en el Ministerio del Interior, esta vez del PP. Nada, que todos son iguales. ¡Asquerosa y putrefacta política carpetovetónica!
Y el cáncer de la crisis económica, social y política está extendiendo cada vez más su metástasis por todas partes, sobre todo al ciudadano de a pie, al que el paro y la necesidad le están llevando ya a una fase terminal.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo