Gracias, Amigos de Cudillero
El pasado sábado día 15 celebramos los socios del Centro Asturiano de Valladolid y Amigos de Cudillero un acto de hermanamiento.
El día comenzó con la visita, a las doce del mediodía, a nuestras instalaciones de la finca en la Overuela. Nuestros amigos de Cudillero fueron recibidos por miembros de la junta y otros exdirectivos, los cuales enseñaron la finca. En ella pudieron ver «la cueva de la Santina» (réplica de la original), el hórreo (donde están las oficinas de la entidad), la bolera, la llave (juegos autóctonos), junto a los árboles (manzano, avellano, acebo, tejo, etcétera...) que fueron importados de la tierrina.
Nuestras instalaciones interiores: bar, sidrería, salón comedor, salas de juegos para adultos y niños, salón de exposiciones y casa de cultura. Finalizando con un aperitivo.
El acto de hermanamiento se celebró en el hotel Felipe IV, sito en el centro de la ciudad, y a él asistieron numerosos socios de ambas entidades.
Abrió el acto la presidenta del Centro Asturiano, María Concepción del Fueyo Álvarez, continuando Juan Luis Álvarez del Busto, presidente de Amigos de Cudillero, el cual dio paso al excelente grupo de ponentes, los cuales dieron brillo y esplendor con sus temas de actualidad.
El músico y etnógrafo zamorano Joaquín Díaz (con raíces asturianas por parte del abuelo paterno). El presidente de la Real Academia Española de Cronistas Oficiales, don Antonio Luis Galiano (desde su Lorca natal). Los prestigiosos don José Luis Balbín, Manolo H. H. y Luis José de Ávila, todos fueron largamente ovacionados.
El acto sirvió, asimismo, para presentar la cuarta edición de la revista anuario «El Baluarte», editada y dirigida por Álvarez del Busto.
Finalizados estos actos, se intercambiaron diversos obsequios las dos entidades.
Al acto asistieron representantes del Ayuntamiento de la ciudad. Presidente de la Federación de Casas Regionales, Asociación de Alzhéimer, entre otros.
Antes de la cena se invitó a todos los asistentes a un «corte» de jamón.
Fue un día muy emotivo por lo que significa el hermanamiento con nuestros paisanos. Los Amigos de Cudillero y los socios del Centro Asturiano, desde ahora, somos más que «paisanos», somos amigos. Actos de esta índole engrandecen a los pueblos y a la sociedad.
Para mí fue triplemente emocionante. El hermanamiento y encontrarme con los amigos de Aller, Ramiro Fernández (psicoesteta-peluquero de la selección española de fútbol), que será nuestro próximo pregonero en las fiestas del Centro Asturiano, él acompañó en el viaje a los pixuetos, y Franco Rodríguez (llegado desde Barcelona), empresario allerano, fundador de los premios «Dionisio de la Huerta», entre otros cargos. Ambos fueron pregoneros de las fiestas de los Humanitarios de San Martín, de la que somo socios. Por motivos de salud personal hacía año y medio que no nos veíamos.
Gracies, pixuetos, prestóme mucho, pasélo bien, ficimos tolo posible pa que la folixa resultare bona, «El Baluarte» tien bona presencia, empecé a lleelu hoy mesmo.
El lunes, día 17, recibí una llamada desde Oviedo: «¡Hola, Fito, soy Montse!», «¿Montse?», dije yo. «Sí, Montse, la viuda de Armando. Llamábate para darte las gracias por lo bien que tratasteis a los de Cudillero, lo sé por mi prima, que habló contigo y tu mujer, Clemen, ella fue una de las que acompañaron al grupo de Asturias».
Armando fue uno de los fundadores del Centro Asturiano y miembro de la junta directiva (1983-1988). Se nos fue muy joven.
Gracias, amigos de Cudillero, que sigáis faciendo patria con la cultura como estandarte.
El Centro Asturiano nun subió un peldañu más en su historia, sino unes cuantes escaleres.
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