La Nueva España » Cartas de los lectores » Carta de una hija a la muerte de su padre

Carta de una hija a la muerte de su padre

4 de Abril del 2014 - M.ª Pilar Rubio Menéndez (Oviedo)

Pocas personas han dejado una huella tan profunda en su caminar como Toño.

Me gustaría tener la pluma de Manrique para escribir unas coplas a la muerte de nuestro padre, porque lo compartí con otros cinco hermanos; y escojo con tiento la palabra compartir, ya que, como buena familia numerosa, hemos rivalizado por su amor y dedicación. No nos asusta haberlo hecho hasta cuando le visitamos en su cama de la UVI, porque era tan grande... Tan grande era que hasta en su lecho, que fuera de muerte, nos dio una lección magistral concluyendo lo que durante años fue una de sus inquietudes: que por encima de todo permaneciéramos unidos, nos quisiéramos y respetáramos. Eso, por fin, creo que lo hemos aprendido para siempre.

El dolor por su pérdida nos ha abierto las entrañas y de ahí ha brotado su esencia, la impronta que ha dejado en nosotros. Nos hemos querido como nunca, nos hemos apoyado, hemos llorado unos mientras los otros nos sostenían, hemos discutido, nos hemos perdonado.

Y es tan grande este legado que ha llegado hasta sus nietos. Han descubierto todas estas cosas junto con su gran amor por la vida y el dolor tan hondo de su pérdida. Han aprendido a valorar cada mañana que amanece para ellos y a saber disfrutar de cada momento.

Desde luego que su vida fue poesía, fue una oda a la alegría, al trabajo bien hecho, a la naturaleza, al ocio, a la literatura, al descanso, a la cultura, a la familia, a los amigos, al deporte. Tantas cosas, pero sobre todo una: el bien. Como un amigo cercano dijo en el tanatorio, si algo caracterizaba a Toño es que siempre hizo el bien en la sombra. Y es su sombra ahora la que nos envuelve y nos indica el camino que él recorrió y que a nosotros nos gustaría seguir con su ayuda.

Papá, podría llenar las hojas de los árboles que tú plantaste en Valjunco con palabras hermosas sobre ti y serían pocas. No querría dejar de decirte que hasta en la mujer que te acompañó en este viaje de la vida encontraste un ángel. Ella ha permanecido todo este tiempo, también en la sombra, a tu lado, escondida, pero a tu lado. Habrás sentido su presencia, habrás comprobado cómo se ha mantenido junto a ti hasta el último minuto, sosteniéndonos a todos con su fe y entereza. Ella ha entendido como nadie el gran misterio del matrimonio, y, al igual que tú, está siendo una piedra donde apoyarnos. La cuidaremos en tu nombre. Recuerdo en el hospital cuando te dijo que ahora le tocaba a ella cuidarte y que algún día te tocaría a ti cuidarla a ella; aunque tenías punzones en la garganta, lograste responder con un: «Como siempre». No faltarás a tu promesa porque lo haremos en tu nombre. Todos a una.

Gracias, papá. Es un honor ser tus hijos.

Tu hija, que te quiere

M.ª Pilar Rubio Menéndez, hija de José Antonio Rubio Baizán

Oviedo

Cartas

Número de cartas: 46126

Número de cartas en Octubre: 64

Tribunas

Número de tribunas: 2088

Número de tribunas en Octubre: 2

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador