Atraco a mano armada
Viernes Santo. C/ Marqués de Gastañaga nº 13. Hora: 10.15 de la noche.
Es puente festivo en toda España pero yo trabajo; soy músico y tengo una actuación. Llego a Oviedo a las diez de la noche, encuentro un sitio para aparcar y así lo hago. Hay una señal, me bajo del coche y me acerco a leerla para cerciorarme de estar actuando correctamente.
La señal dice: Prohibido aparcar excepto vehículos oficiales. Autorizado domingos y festivos.
Como es Viernes Santo dejo el coche tranquilamente, descargo los instrumentos, los llevo al bar, instalamos, probamos sonido y listos. La actuación empieza a las onde y diez de la noche y termina a la una y media de la madrugada. Después, recojo mis bártulos y —ayudado por un compañero— los llevo hasta el coche.
¡Sorpresa! El coche no está. ¿Me lo habrán robado? ¿Qué habrá pasado? No veo indicios de nada. Pasa un coche de la Policía local, les indico si pueden parar y así lo hacen. Ellos son quienes me aclaran que a partir de las doce ya empieza el sábado y que ya no es festivo, que es así aunque sea Sábado Santo, que lo habrá llevado la grúa. Va llegando más gente (pareja de Salamanca, chico joven de Gijón) y ahora soy yo quien les explica lo que puede haber sucedido. Todos juntos cogemos un taxi hasta el depósito municipal. Allí están los coches: trámites, DNI y abono de 84,60 euros en concepto de arrastre (la multa queda pendiente, son 90 o 45 euros por pronto pago).
Realizando los trámites observamos la procesión, gran procesión de grúas arrastrando coches llegan a ritmo de romería. El depósito municipal está lleno.
Reflexiones:
¿Trabajan las autoridades en Sábado Santo?
¿Trabajan cualquier sábado desde la una de la madrugada hasta las ocho de la mañana?
¿Hasta dónde llega la necesidad de recaudar?
¿Se está confundiendo recaudación con atraco?
Conclusiones:
Trabajo de madrugada y cobro 50 euros por mi trabajo. Pago 85 por el rescate de mi coche y debo una multa de 90 (45 si es pronto pago). Soy partidario de cumplir la normativa, pero en este caso me parece un atraco a mano armada. Saque el lector sus propias conclusiones.
¿Quién se está forrando a costa de incautos ciudadanos?
¿Es esto lo único que puedo hacer, escribir una triste carta a la prensa?
Félix Morales Sánchez, músico, Gijón.
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