El de la coleta
Después de lo sucedido el domingo 25, el de la coleta no ha dejado indiferente a nadie: por el carril central, la de fucsia no sale de su asombro; por el carril izquierdo tampoco, la pasada que les dieron por el arcén fue impresionante.
Mención aparte merecen el partido del Gobierno y los del fondo a la derecha: están que fuman en pipa y ya les entró el canguelo, pues se temen que esto no va a ser flor de un día.
Además no entienden cómo es posible que se le diera cancha en los medios de comunicación a un tipo como éste, ellos que siempre quieren tenerlo todo atado y bien atado.
Y son tan berzas que lo que no entienden es que la gente corriente está hasta las narices del Gobierno, de la oposición y de todos los mangantes que convirtieron la política en un modo asqueroso de ganarse la vida.
Que estamos cansados de mentiras, de que nos roben y de que se dediquen a hacerle el trabajo sucio al poder financiero, olvidándose de la gente.
Que estamos hasta el gorro de que los recortes y los ajustes vayan dirigidos siempre a los mismos, mientras ellos siguen con sus sueldos, dietas, coches oficiales y un largo etcétera de privilegios.
Algunas ideas...
Ya que tan mal estamos, empiecen a predicar con el ejemplo: bájense de los coches oficiales, bájense el sueldo, dejen de cobrar dietas vergonzosas, sean decentes, pidan perdón por el desastre al que nos han conducido y, por una vez en su vida, digan la verdad... ¡ah! y los mangantes y chorizos con cargos públicos o en organizaciones políticas, primero a su casa y luego, si toca, a la cárcel.
Si lo hicieran, probablemente podrían salir a la calle, no como ahora, que si aparecieran sin sus escoltas, más de uno se quedaría con las ganas de romperles la cara.
Y les extraña el éxito del de la coleta, que independientemente de sus planteamientos políticos, lo único que hizo fue expresar lo que muchos ciudadanos de este país piensan: que estamos cansados de sus engaños y de la gran estafa en la que se ha convertido esta crisis económica. Seguramente esto será populismo, pero si sirve para dar un susto a todos estos profesionales del mangoneo, bienvenido sea.
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