Cotos de salmón ¿para qué?
Según el Gobierno del Principado y cara a asegurar la susistencia del salmón, tenemos cada año una normativa más restrictiva, solamente se puede pescar a todos los cebos desde el último domingo de abril y hasta el día 15 de junio, suprimiendo los lunes y jueves como días hábiles. Esto, entre otras cosas, conlleva que el día de apertura se pescan innumerables salmones, los cuales podían ser sacados gradualmente de abrirse primero la temporada.
Aparte de la recaudación y el turismo, uno de los mayores objetivos de los cotos es restringir el número de pescadores y evitar la presión en dichos tramos. Para pescar en un solo coto hay que ir a un sorteo y abonar entre 80 y 120 euros, según categoría, por tres pescadores y día. La realidad es que nadie sabe los criterios “políticos” de cómo se clasifican los cotos, el Eo tiene un 90 por ciento acotado y otras estrellas como el Sella o el Narcea sólo un 30 por ciento, se establecen los vedados, hay cotos que llevan años sin dar un salmón y otros que cuando los dan se convierten en zonas libres (con o sin muerte), se reconvierten cotos de reo en Cares y Eo (a 33,18 euros) a partir del 16 de julio y en el resto se siguen pagando como de salmón (cuando no los hay) y un largo y nefasto etcétera más.
La realidad es que martes y miércoles no hay zona libre (a no ser sin muerte) y todos los cauces están acotados, pero de viernes a domingo los cotos parciales desaparecen y son zonas libres, entonces hay una presión extrema de pescadores en cada cauce. Estos días y durante más de quince horas diarias, hay kilómetros de río con todas sus posturas ocupadas por centenares de pescadores a la “media hora”. Tómese, por ejemplo, el Narcea, al que sólo han dejado cinco cotos tradicionales seguidos, en la zona media alta, de los quince que llegó a tener y en el que en los dos últimos fines de semana de mayo se han sacado dos salmones en ellos y otros 150 salmones en la “zona libre baja”. A esto añadimos que otros cinco cotos se han habilitado como zonas libres de pesca sin muerte y en concreto en uno de los mejores, “Arenas”. Con esta presión ¿cuántos de los salmones devueltos sobrevivirán? Con esto y con la inexistente vigilancia debido a la exigua dotación de la guardería, ¿llegará algún salmón a las zonas de freza?
Por otro lado, este año tuve un coto de viernes en el Sella, con varios cupos pescados en el mismo. Fuimos con toda la ilusión a dormir de jueves y ver el río. Vimos varios salmones y nos las prometimos muy felices, pero el viernes los salmones desaparecieron; en su lugar, vimos en el fondo innumerables piedras blancas que el día anterior no estaban. Curiosamente, ese día salieron tres salmones en la zona libre superior contigua al coto.
Antiguamente la proporción de salmones en cotos oscilaba entre un 20 o un 30 por ciento; en la actualidad, y en esta temporada, anda por debajo del 2 por ciento, “buen promedio”. Señores del Principado, déjense de historias, estudien y habiliten criterios en los que deje de existir esa presión sobre el río, no puede haber gente que vaya solamente una o dos veces al río, a cotos, y que otros estén de continuo en él y algunos de forma irrespetuosa.
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