Carta abierta a los vecinos del Cristo
Si antes de empezar a leer esta carta quién se ponga a ello mira quien es el remitente, algunos no me conocerán por el nombre ni por el apellido; otros tan vez si . Pero para qué no quepan dudas sobre el conocimiento que pueda tener de la zona, diré algo al respecto.
Desde 1972, hasta prácticamente hoy, he pasado el mayor tiempo de mi vida en El Cristo. Desde el Bar Montaña, al Calderón; y de Casa Javier al Acebo. O: desde Las Vegas al de la Plaza de Toros, o desde allí, al Bar Alto pasando por Casa Suárez. Es deci, he visto el auge y el apogeo que experimento la zona, desde la llegada del HGA y la Residencia Sanitaria, allá por 1964, más o menos, amén como no, de las facultades. Por eso, no quiero ver ahora el ocaso por la gran mentira que fueron las razones que pretendían y pretenden justificar la construcción del hoy ya una realidad nuevo HUCA.
Creo que todos los vecinos, o casi, recordarán que una de las razones de más peso eran los accesos. Hoy pueden comprobar como se inauguró uno sin ellos. Por tanto, he ahí una constatación más de las mentiras interesadas que se divulgaron en su día y que no eran otras que las de la falta de accesos. Mentiras sin paliativo alguno fueron todas las que pretendían justificar la construcción del nuevo. Desde la falta de espacio, que se cae por sí sola, pues de no haber edificado en el antiguo Colegio de Sordomudos no hubieran ahogado el I.N.S.
Si hubieran querido habrían traslado la Plaza de Toros. Hoy cuestionada. Y el Cuartel de la PN. Y las dependencias del Parque móvil. Esta última fuera del centro de Oviedo, como lo esta la Guardia Civil, la Policía Municipal o el cuartel del Milán, hoy del Príncipe. Si no hubieran tenido tanto interés,( o intereses ) hubieran aprovechado todo lo que ocupa el Instituto Adolfo Posada.Y si hubieran querido, habrían restaurado o edificado sobre los solares hoy existentes (Valdecilla lo hizo, sin dejar la asistencia, cuando se derrumbo una de las fachadas).
Como podéis ver las razones esgrimidas eran puras mentiras interesadas. Por eso, por que lo fueron y los hechos lo demuestran, no pueden ni deben sufrir las consecuencias, ni los vecinos, ni los hosteleros, ni el pequeño o gran comercio de la zona, al que incluyo -como no- El Calatrava, hoy empezando a estar en franca decadencia, respecto por ejemplo, de Parque Principado.
Desconozco, cuales fueron las promesas que se han hecho a la AA.VV del Cristo por parte de quienes han ido a visitarles,a socorrerles o a hundirles más. Pero de mi mal consejo, quién ha mentido antes, al menos la duda, de que lo haga ahora debe de tenerse muy cuenta. Y todos sabéis quienes y quien os han mentido, sobran por tanto, siglas o nombres.
Saben quienes me conocen, saben que mal o bien, con acierto o con desacierto, siempre he intentado hacer algo útil por el HGA y la Residencia. Por tanto, de ello se desprende que lo que haya podido hacer de bueno a repercutido en todo el barrio del Cisto; pues como dije al principio, mi vida se desarrolló alrededor de todo el complejo sanitario por ciert, la mía y la de miles de personas que hoy deben de desplazarse a la Cadellada. Lugar donde han tenido que derribar un Hospital que prestaba un servicio a los enfermos mentales, por otro, que bien estaba y menos hubiéramos costado en el Cristo.
Término, poniéndome a vuestra disposición para todo aquello que consideréis puedo seros útil. Aunque podéis estar seguros de que sin pedírmelo yo jamás os dejare, si puedo, que os vuelvan a mentir. Como tampoco me doblegare, a que vaya decayendo una zona tan próspera, sin dar una alternativa, que aunque se, que nunca será igual, al menos palíe la injusticia que con ese Barrio se ha hecho.
¡A eso empeño mi palabra, a poco que me ayudéis!
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