De hospital a geriátrico
Una nueva vida para el exhospital Álvarez Buylla. Empiezo este escrito con todo mi respeto y consideración a la atención de los señores alcaldes de los concejos de Mieres, Pola de Lena y Aller.
Desconozco la base documentada por parte de la federación vecinal de Mieres para reclamar la demolición del hospital, omito la palabra viejo hospital porque creo que una edificación con poco más de 50 años y que hasta hace cuatro días estuvo operativo al 100%, sin que un servidor supiera de denuncias por peligro de derrumbe, se le pueda dar el calificativo de viejo.
El cierre de dicho centro fue motivado por otras circunstancias y no por su estado ruinoso. Este centro no se puede demoler así porque sí; en los tres concejos que tenían como destino preferente para el ingreso de sus enfermos hoy tienen la ocasión de un gran geriátrico que pueda atender a los ancianos y minusválidos con pensiones o ingresos muy pequeños y no tener que abonar las cantidades que en cualquiera de los centros existentes sobrepasan los mil euros que no ganan.
Las autoridades de estos concejos deben recabar del Gobierno autonómico un completo y veraz estudio de la situación del excomplejo sanitario antes de proceder a lo que parece más favorable, demolerlo, si el estudio fuera positivo, la remodelación y adaptación sería sencilla, nada igual al geriátrico de Felechosa, algo similar al de la Pola de Lena bastaría.
Para terminar, rompo una lanza en favor de mi antigua Residencia Sanitaria “Enrique Cangas” de Mieres en la que trabajé como jefe de personal subalterno que aún pueda ser beneficiosa adaptando los precios de su ingreso a las pensiones que se perciban al igual que en la Residencia Santa Teresa de Oviedo donde la esposa de un amigo está pagando 470 euros al mes y no tener que abonar por ingresar en un sencillo piso convertido en residencia de ancianos como he dicho más de mil euros.
Roberto Gómez Suárez
Oviedo
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