Cardenales
Un cardenal es un príncipe de la Iglesia o una equimosis, según venga del latín, cardo (quicio), o del griego, echýmosis (derrame). Cañizares es cardenal de cardo y, además, cardenal de curia. Que a un cardenal de Roma lo devuelvan de obispo a Valencia viene a ser como si cesan a un ministro para hacerlo gobernador civil de una provincia. Intrigado, puse en Google Cañizares cardenal y, sin entrar en el listado de los temas, pinché en imágenes. Les recomiendo la experiencia: Un deslumbramiento. La pantalla se pone al rojo vivo con el pobre Cañizares sumergido, náufrago en una marea de púrpura.
Cañizares es la anécdota. La categoría es que la institución eclesiástica haya llegado a eso y persista en ello. ¿No hay algo de zoológico en eso de marcar la jerarquía por lo chillón del colorido y por los metros de tela? Como los bichos, que se encrespan para asustarse unos a otros. Hasta el Papa se debe de sentir intimidado, al abrigo escueto de su sotana blanca, cuando se le viene encima un cardenal con su flameante arboladura, dinosaurio de trapo que no arrastra la cola porque se la sostiene un acólito. ¿Nadie se percata en las alturas de que se sacan las cosas de quicio con esos desparrames?
Se argüirá que la pompa de las instituciones tiene su función y es compatible con la austeridad personal. Será verdad. Pero es más que dudoso que sea compatible con el buen gusto y con el sentido del ridículo. La mayoría del clero y tantos cristianos de a pie llevan una vida simple, acorde con lo que creen y predican. No es justo que, desde la cúspide (la parte más visible de la Institución), se desvirtúe ese testimonio con exhibiciones tan arcaicas e incongruentes de mundanidad. El sentido común tiene ahí tela que cortar.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo