El problema son los residuos
Algunos de los residuos nucleares que hoy se están enterrando, dentro de 10.000 años aún presentarán peligro mortal. ¿Cómo señalizar su presencia durante ese largo tiempo? ¿Cómo prevenir la amenaza de las generaciones futuras? ¿Qué señalizaciones utilizar? ¿Qué tipo de monumentos construir sobre la superficie de los almacenes subterráneos? Este es el rompecabezas sobre el que reflexionan actualmente decenas de científicos. 176.000 metros cúbicos de residuos nucleares serán enterrados en la mina de sal de Los Modanos. ¿Cómo indicar el peligro para las 400 generaciones? Una mañana de verano del año 1991, un grupo de investigadores visitó la mina de sal de Los Modanos, a 655 metros de profundidad: Lingüistas, ingenieros, arqueólogos, e incluso autores de ciencia-ficción. ¿Qué hacen estos brillantes personajes bajo el desierto de Nuevo-México, a 42 kilómetros de Carlsbard, la ciudad más próxima? Unos meses antes, todos habían recibido una llamada de un alto cargo del Ministerio de Energía amerciano invitándoles a participar en un grupo de reflexión sobre un sorprendente proyecto. En el fondo de la mina un oficial explica que la mina de sal es un lugar eminentemente estratégico para depositar los residuos radiactivos del programa americano de fabricación de armas nucleares. Y es que después del proyecto Manhatan en 1942 (proyecto de la bomba atómica), sehan acumulado millares de máquinas herramientas, recipientes con materiales contaminados con plutonio o americium; toda clase de objetos de los que será bueno acercarse a ellos antes de decenas de miles de años, el tiempo en que se disipen sus emisones de rayos alfa. El día 8 de julio de 2009, "Diario de Navarra" publicaba lo siguiente: "El ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, aseguró que después del verano saldrá el concurso para acoger al Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos nucleares y aseguró que habrá "pelea" entre los aspirantes a albergarlos". ¡Así, como si se tratara del premio gordo de la Lotería Nacional! Hoy, quizá, todos los científicos y la mayoría de los políticos son partidarios de aprovechar las ventajas de la energía nuclear, pero el problema de los residuos radiactivos es otra historia. (Datos tomados de la revista Science et Vie).
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