El derecho a vacaciones de las mascotas
Cada año se intenta concienciar a la sociedad para que no abandone a sus animales de compañía, en especial al perro, con mayor hincapié durante el período estival. De acuerdo, abandonar un animal debería estar castigado. Para evitarlo existen residencias caninas, en su mayoría caras o de dudosa calidad, y por lo tanto cada vez son más los dueños que deciden llevarse a su amigo de vacaciones. Toda una odisea.
Empezando por el transporte público que, aunque no imposible, dificulta que te puedas llevar a tu amigo de viaje, en especial si es grande o son más de uno. Pero lo más difícil es encontrar un alojamiento que permita la entrada de animales de compañía y muchos de los que dicen aceptar animales, únicamente admiten animales siempre y cuando no superen un peso determinado muy fácil de superar con un perro mediano. Pero no todo acaba aquí, una vez en tu destino de vacaciones, o incluso de vivienda habitual, es complicado encontrar lugares a los que se pueda acudir con perros como playas y parques.
Los dueños de perros (y en general de cualquier especie animal) tenemos que acatar una serie de leyes como la recogida de excrementos, microchip, llevar al perro atado... pero a la hora de tener derechos no lo son tantos. Pedimos poco: seguir el ejemplo de muchos países europeos y que los perros puedan viajar en transporte urbano, un mayor número de hoteles que permitan su entrada, acceso a parques y que puedan acudir a alguna playa durante el período estival o tengan una zona acotada para ellos. Los perros también tienen derecho a ir a la playa.
Afortunadamente, Oviedo está en el camino, permitiendo la entrada de perros a sus parques (Campo de San Francisco, Parque de Invierno, la ruta de Fuso...). Aunque, ahora que se va a ampliar el campo de Invierno no estaría de más que hubiese una zona especial para ellos, una zona amplia donde poder jugar con ellos sin molestar a los paseantes y donde poder practicar agility. Sin embargo, aún puede mejorar.
A Gijón le queda más por hacer. Permitir la entrada de los perros en sus parques y acotar una zona de playa que puedan acudir en los veranos sería la principal.
Animo a los ayuntamientos de las distintas ciudades asturianas a mejorar en lo posible estos aspectos.
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