Se me ha ido un ángel
El 23 de octubre se cumplió un mes del fallecimiento de mi tío, José Martínez González, Pepe, en Oviedo, en la residencia El Cristo. Fue un alma pura y buena, cuyo cerebro, a consecuencia de la guerra, dejó de desarrollarse a los 4 años; tenía 83 cuando falleció, pero era un niño de 4 años. Fue muy trabajador, aquí y en Venezuela, adonde emigramos, eso sí, trabajos básicos... y sus días más felices llegaron al final de su vida... Los mejores, en el centro de día de la residencia del Cristo, donde además de divertirse y entretenerse recibió el cariño que se merecía... A todos los que lo cuidaron, incluido el transporte, muchas gracias.
Luego su condición se agravó y fue internado en la planta segunda de dicha residencia El Cristo, donde siempre recibió el mejor trato pro parte del personal, desde el personal de limpieza a empleadas, auxiliares, personal de enfermería, ama de llaves, personal de recepción, el cocinero -le encantaba su comida-, y sus compañeros, que le daban ayuda, cariño y compañía. A todos ellos, muchas gracias, espero no haber olvidado mencionar a nadie, si es así, me disculpan, pero yo no los olvido...
No puede faltar en mi agradecimiento el director de la residencia, y muy especialmente su trabajador social José Antonio, paño de lágrimas y solucionador de problemas.
Incluyo aquí también al gran gaitero Vicente, El Pravianu, eran amigos desde Venezuela, ya que la pasión de mi tío eran la gaita y la canción asturiana. El Pravianu amenizó gentilmente con su gaita el último cumpleaños de mi tío. Muchas gracias, Vicente.
Finalmente, además de los médicos del HUCA, que lo atendieron de forma especial, agradecerle a su médica de cabecera, la doctora Maximina Fernández, quien hizo lo posible por atenuar su sufrimiento y, además, tuvo que aguantar todas mis peticiones para él. Muchas gracias, doctora Maximina.
Se me ha ido un ángel. Sé que ahora no sufre, pero ha dejado un vacío imposible de llenar, por ello quiero reconocer así a quienes de una u otra forma le hicieron la vida más feliz o llevadera.
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