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¿En quién confiar?

10 de Noviembre del 2014 - José Viñas García (Oviedo)

Lo peor de esta lacra de corruptela que nos invade, no es (que también) el alarmante número de corruptos. Tampoco lo es (que también) que estén involucrados altísimos cargos públicos, o la impunidad que observamos, donde se castiga a los Jueces y se dejan libres a los sinvergüenzas de cuello alto. Incluso tampoco (que por supuesto) el que estos corruptos estén repartidos en todas y cada una de las intendencias Publicas, ya sea Monarquía, Comunidades, Ayuntamientos, Bancos, Cajas, Agrupaciones empresariales, Empresarios, Sindicatos, Jueces, Fiscales, Hacienda Pública, Policía Judicial, Diputaciones, etc. Lo grave de todo este asunto tan denigrante y perjudicial para toda nuestra sociedad, es que estos golfos con su cara dura, hacen que no podamos confiar en nadie, ya que todos nos daban lecciones de cómo había que erradicar a los corrompidos, y ¡fíjense su catadura moral! Que hablaban como verdugos de sí mismos, en propia persona, eso sí, no esperaban ser descubiertos jamás, ya que alguno hasta inauguró la cárcel donde está por listillo; eso sí, esperando una ayudita de los de su banda, como hicieron con Matas o harán con la Infanta.

El Granados, con aquello de que él era el Trigo, y que había que hacer desaparecer la paja, que todos los golfos devolvieran hasta el último euro ¡menudo trigo limpio! Qué decir del Iranzo, ese economista que daba lecciones de todo, apoyando la cruel política económica de ajustes de Rajoy y él derrochaba hasta en lencería fina con una tarjeta opaca de Bankia. Podemos seguir con los reyes del mambo de nuestra patronal, que pedían trabajar más y ganar menos, y ellos a pleno lujo saltándose a la torera toda reglamentación fiscal y empresarial. Qué decir del Honorable Puyol, del Señor del SOMA o del extremeño que caía bien a todos. Seguimos con la Cospedal y Rajoy ¡Vaya dúo! estos dos, son de dar de comer aparte, puede que sean trigo limpio, pero la paja les cubre hasta la cabeza, hasta su amigo y tesorero los tiene anotados en sus papeles y como que nada ocurre ¡este es un País diferente! ¡Viva la juerga, el vino y los chuches! fueron capaces de aplicar una reforma laboral que despide gratis, que legalizo el trabajo indigno y de esclavitud; siguiendo con ajustes y recortes que despidieron y empobrecieron a una parte importante de este País, mientras ellos se repartían sueldos, sobres y sobresueldos como churros; sin tener en cuenta que ponían la mano en el fuego por cada corrupto que les salía al lado. Así podemos estar enumerando sujetos de poco fiar que llevábamos años pensándolos los azotes de la corrupción, cuando ellos mismos formaban parte de ella.

Cuando se dice que la mayoría de políticos son honrados, es mentira, quien lo es, y no denuncia a los que están a su lado cometiendo fechorías, es tan culpable como ellos; y añadiría que son éstos honrados los que hacen que no podamos confiar en nadie, ya que amparan, indultan, apoyan, esconden y ponen la mano en el fuego por los golfos de su camada.

¿Después de lo de Puyol, Villa y Monago les queda alguna duda que la mayor parte de los políticos están marcados por la tremenda duda en su honestidad y falta de credibilidad? que por mucho que nos lloren como Monago, digan como Puyol o guarden silencio como Villa, ya no son creíbles. Y aquí reside el daño, una sociedad donde no puedes confiar en nadie, está podrida y necesita no regenerarse, si no el morir de asco todos cuantos hemos consentido este desaguisado.

Señores Fiscales, si no quieren el día de mañana cuando gobiernen los de Podemos, ser parte a investigar por apatía, compadreo o dejadez de funciones, empiecen por aportar pruebas para sentar en el banquillo sin atajos y retrasos, para castigar a todos estos sinvergüenzas que nos robaron la esperanza y la credibilidad.

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