La Nueva España » Cartas de los lectores » En memoria de los campaneros de Ensidesa

En memoria de los campaneros de Ensidesa

26 de Enero del 2015 - José Luis Álvarez Lauret (Gijón)

LA NUEVA ESPAÑA del domingo 25 de enero, en su página de Avilés y comarca dedicaba toda una página a la memoria de quienes en los años cincuenta del pasado siglo fueron en Asturias famosos por la peligrosidad de su trabajo, mientras se construía en Avilés la factoría de ENSIDESA. Me refiero, a los famosos Campaneros.

Por aquel entonces, yo era un chavalín que trabajaba de aprendiz de ebanistería en mi Mieres natal, y comprar un periódico a diario entonces, no estaba a mi alcance, pero sí lo compraba a diario el dueño del taller y tenía la amabilidad de dejarme darle un vistazo en mis ratos libres. Era frecuente entonces, ver en prensa la noticia de algún accidente incluso con el fallecimiento de alguno de aquellos que trabajaban en las tristemente famosas campanas de ENSIDESA; casi siempre habiendo venido las víctimas a nuestra Asturias desde tierras lejanas, principalmente desde Andalucía o Extremadura y la Mancha, empujados por las consecuencias de una pertinaz sequía habida entonces en esas zonas (de hecho, se les denominaba sequías) así, casi despectivamente, como si ellos fueran culpables de tan calamitosa situación.

Recuerdo con tristeza, que una tarde al salir del taller, me paró un señor que llevaba una indumentaria descolorida por el sol y unas pequeñas alforjas al hombro, y me preguntó si aún faltaba mucho para llegar a Avilés; parece ser, que falto de dinero, se había visto obligado a bajarse del tren en Pola de Lena, y pretendía llegar a Avilés andando, ya que según su información y manera de expresarse, allí había faena. No quiero ni pensar lo que sufriría el buen hombre para llegar a donde le esperaba esa especie de infierno si tuvo la desgracia de conseguir trabajo en las puñeteras campanas que sirvieron para cimentar las naves de la factoría siderurgica avilesina, de la que luego tantos otros vivimos, unos ganándose el pan con más o menos sacrificio, y otros de verdaderos parásitos estrujando el sudor y esfuerzo de tanto sacrificado.

Que cada cual haga examen de conciencia y juzgue en consecuencia. Pero tanto quienes consiguieron un puestazo como quienes sólo tuvimos un puestín, creo que debemos mucho a aquellos hombres que obligados a abandonar sus lugares de procedencia, hicieron con su sacrificio, posible el que Avilés y Asturias fueran durante medio siglo vanguardia de la industrialización de España. Vaya todo mi respeto y consideración, hacia Antonio, Alfonso y Jesús, que hoy lo cuentan en este periódico, pero especialmente, hacia tantos otros que para su desgracia, se quedaron en el camino. Reciban todo mi más sincero reconocimiento, afecto y agradecimiento.

Cartas

Número de cartas: 46053

Número de cartas en Septiembre: 157

Tribunas

Número de tribunas: 2086

Número de tribunas en Septiembre: 8

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador