¿Sentimientos encontrados?
Pues sí. Ya que estoy convencido de que cuando nos referimos a Foro y a F. Álvarez-Cascos ya han empezado a aflorar los sentimientos encontrados. Algunos han pasado de la defensa irreductible del ya expresidente de Foro a la de solo Foro, aun a costa de claudicar de los principios fundacionales, basados en quien ha sido causa y motivo, por el que se creó.
Hay quien digiere mal, como es mi caso, el futuro de un partido como éste, sin Cascos. Uno, porque no lo es, ni en su esencia ni en su corto desarrollo. Y otro, porque el exvicepresidente del Gobierno lo era todo. Era el candidato único. El presidente aclamado. Y quien ganó las elecciones sólo con ser quien es. Pretender ahora –o justificar– una defensa al mismo nivel que la que hemos hecho de F. Álvarez-Cascos tiene todos los visos de ser más “un deseo” que una realidad. Un deseo de pensar que sin su fundador Foro ya se está consolidado en Asturias, y una realidad que demuestra todo lo contrario.
Las razones en que me baso para demostrar lo que afirmo no son de un carácter mas parecido a un “hooligan” o a un irracional “fan”. Todo lo contrario: son razones lógicas y de sentido común, cuando de un partido político hablamos, como es el caso, máxime con la independencia y libertad que me da el no estar condicionado a ningún organismo del mismo que me pudiera inclinar por la opción que me fuera mas beneficiosa. No es el caso.
Un repaso a los últimos acontecimientos acaecidos, en y desde, la dirección de Foro, con la anuencia o no de quien era su presidente, demuestran que no se han dado los pasos –que son de manual– necesarios para fortalecer un partido con vistas al relevo de su líder mas carismático y con visión de permanencia en la vida política asturiana. Mas bien todo lo contrario: no se ha hecho una verdadera, real y democrática elección de su sucesor en el cargo, sino que ha sido una designación “dirigida” desde los ámbitos más influyentes.
Si la voluntad fuera la de la continuidad de un partido como el nuestro, que nace de una “corriente de opinión” como consecuencia de la partitocracia que en Asturias estábamos hartos de padecer; unido al aislamiento vergonzoso de todos los asturianos con respecto al resto de España, las cosas se hubieran hecho de otra manera. En principio, la elección del sucesor, que debiera haberse realizado, con “luz y taquígrafos”, con el tiempo necesario, para no improvisar como se ha hecho. Después se debieran haber realizado los congresos en todos los municipios, pero siempre –reitero– después de haber realizado el II Regional con todas las garantías de participación, elección, discusión y acuerdo plenario.
Si alguien cree que se ha hecho así, o que como se hizo es lo mejor, ese alguien no tiene razón. O quienes hoy, pasados los congresos, siguen manifestando que este “nuevo Foro” tiene futuro están equivocados. Luego están los que, como yo, opinan todo lo contrario. Créanme o no, mayo confirmará a unos y desautorizará a otros. Por ello, si como consecuencia de lo que –para mí– está mal hecho el resultado de las próximas elecciones autonómicas y municipales certificará mis malos augurios. No queda mas solución (al menos intentarlo) que abrir un congreso extraordinario para “refundar” Foro, pero ya sin Álvarez-Cascos, y con todas las garantías de imparcialidad, democracia, participación e independencia.
De no lograr hacerse así, el futuro, salvo unos resultados electorales y autonómicos de cierta consistencia, Foro desaparece, porque así lo habrán querido tanto el propio Álvarez-Cascos como los “figurantes” en el “acta de constitución” en una notaría de Lugones.
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