Equivocaciones de Pedro Sánchez
No es bueno criticar unas primarias, ya que los aprendices que salen de ellas llegan hasta presidentes del Consejo de Ministros y así van luego los asuntos del Estado, casi a la quiebra. Y para promover a una persona de peso hay que saltarse todo tipo de primarias y decidir señalando a dedo a un profesor universitario. Si hubiera sido por primarias, ¿acaso hubiera salido don Ángel Gabilondo para la candidatura de Madrid?
Si uno sigue, aunque sea por la prensa, la oratoria de don Pedro Sánchez, último producto de unas primarias, se advierte que es muy frondoso y ligero de palabra, y a lo mejor también de imaginación, pues va a cambiar todo lo que hacen los demás, desde la política económica, aunque se trate de la corrección de la economía que ha venido a enmendar el tremendo desastre a que llegó el Gobierno socialista, salido de unas primarias. Seguramente, don Pedro Sánchez querrá volver a la quiebra que nos conducía un anterior titular de la secretaría de su partido. Lo mismo en materia de enseñanza, cuando se ha querido corregir algo, aunque no mucho, del sistema de educación que durante treinta años ha dado los peores resultados, colocando a España a la cola de la enseñanza de todas las naciones.
Y por si fuera poco, se propone imponer una enseñanza laica. Lo primero que tiene que saber es qué es una enseñanza laica, pues no es ser ignorante en materia religiosa.
Subtítulo: Lo que producen las primarias
Destacado: La etimología original de laico hace referencia al pueblo cristiano e indica todos los hombres que han sido miembros de la Iglesia. Laicos, por tanto, son todos los bautizados en la Iglesia.
La etimología original de laico hace referencia al pueblo cristiano e indica todos los hombres que han sido miembros de la Iglesia. Laicos, por tanto, son todos los bautizados en la Iglesia.
Si se usa en otro sentido es por una derivación que se ha hecho en la sociedad moderna. Se partió de la idea que los miembros de la Iglesia estaban enfrentados a la jerarquía eclesiástica y de aquí se ha derivado a identificar al laico con enemigo de la Iglesia. Como se puede comprender, en esta forma de entender el término laico hay una "contradictio in terminis".
Por tanto, una enseñanza laica como lo entiende don Pedro Sánchez es inconstitucional y antidemocrática, en cualquier sentido que se considere: si se entendiese en sentido originario, sería una enseñanza religiosa cristiana, pues los laicos son los miembros de la Iglesia desde el siglo I, y sería una educación propia de ellos. Pero tampoco es en el sentido laico que entienden muchos modernamente, porque se trataría de una enseñanza sin religión y ello sería inconstitucional, pues ésta reconoce en la sociedad vivencias religiosas y hay que atender a un problema de la sociedad.
Además, no tendría sentido por dos razones: primera, porque una educación sin tener conocimientos religiosos es dar una educación deficitaria, ya que deja un factor importante de la historia sin explicación. Y, en segundo lugar, porque hay una gran cantidad de familias que la solicitan y ¿dónde queda la democracia que exige tener en cuenta la voluntad de todos los sectores del pueblo? Es absurdo que a aquellos que lo solicitan se les deje sin este conocimiento.
Don Pedro Sánchez, sea un poco más comedido en su facundia y verborrea, pues está expuesto a muchos errores. Aunque, lógicamente, ¿cómo no va a tener errores en numerosas charlas si aun en una cosa tan sencilla y simple como apretar un botón para votar se equivoca? Repetidamente le hemos oído decir que se ha equivocado, pues reflexione y en otros temas mucho más importantes reconozca que se equivoca.
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