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Reglada y formal, frente a qué

5 de Mayo del 2015 - Carlos Muñiz Cueto (Gijón)

Antes de hablar de otras, suelen decir de ella que es reglada y formal, lo que es lo mismo que si alguien afirma que es persona y humana, antes de hablar de otras personas; algo que no dice nada especial sobre lo que realmente se es, pero hasta parece algo importante. Así que vamos a andarnos por las ramas.

Si miran a un árbol, ven que hay hojas, ramillas, ramas, brazos del tronco, y el tronco que se adentra en el suelo con sus raíces bajo tierra. Pues bien, o se contempla el árbol completo o es un absurdo analizar solo parte. Lo mismo ocurre con el tema de la formación profesional: hay toda una estructura formal en forma de árbol que está reglada por infinidad de normas y circunstancias. Así que piensen primero en los puestos de trabajo que, como hojas en las ramillas, hay en todas las empresas y que, obviamente, son puestos de trabajo formales que están bien reglados. Luego, piensen en que muchos de esos puestos de trabajo son afines y contienen al mismo tipo de profesionales bajo las mismas ofertas de empleo, estas son las ocupaciones: dinámicas, cambiantes e innovadoras, y, a pesar de ello, formales y constantemente regladas por el propio uso de la denominación de las ofertas de empleo. Luego vendrán las áreas tecnológicas y las familias profesionales y, por último, los grandes grupos. Pues bien, si pensamos que cualquier profesional lo que quiere es crecer y evolucionar en su empleabilidad, resulta que debe tener para hacerlo un puesto de trabajo donde muestre su experiencia o ejercite sus destrezas, o sea: formación en el puesto de trabajo. Pero antes y durante esa empleabilidad en una ocupación, habría necesitado una formación ocupacional para el empleo, igualmente durante su promoción profesional necesitaría una especialización en áreas tecnológicas específicas o formación ocupacional específica, esto es: formación dual ocupacional /puesto de trabajo. Como el desarrollo tecnológico, y hasta el económico, hace a la empleabilidad cambiante, entonces debe ser: formación permanente dual y ocupacional para el empleo. Si vamos más atrás y nos dejamos de andar por las ramas, llegamos al brazo de tronco que es el grado académico sustentado por el tronco de la ESO, con las raíces, por debajo, de la familia, los barrios, y las escuelas donde se estudió. Ahora, si dejamos atrás la educación y entramos en el Marco Europeo de Cualificaciones (EQF) que es donde debemos entrar formal y regladamente (cosa que no se hace), en él observaremos inmediatamente ochos niveles ocupacionales y dos zonas: el EEES universitario y el no universitario. Es decir: todas las ocupaciones pertenecen ineludiblemente a un nivel y, por tanto, las dos zonas delimitarán las ocupaciones de nivel superior de las que podríamos llamar de nivel medio. En la zona superior la ocupación principal estándar y sus colaterales y, en la media, la media con sus colaterales de: excelencia, estándar, adjunto, ayudante general, al igual que en la superior; todo formal y sin complicación reglada alguna. De esta forma saldrían las ocho ocupaciones genéricas por familia profesional que, en el caso de la familia de la construcción, resultan ser: doctor arquitecto, arquitecto, arquitecto técnico, jefe de obra / albañil de primera, albañil, albañil de tercera, peón. En el apartado ocupacional, como puede verse, todo está bien formal y reglado, no hay ningún problema. ¿Qué ocurre en el brazo del tronco académico que debe llevar hasta las ramas de la formación ocupacional? Pues que el tronco académico no se acaba de formar ni reglamentar estructurando propedéuticamente lo que se debe: Preparación o ingreso al CFGM; CFGM; Preparación o ingreso al CFGS; CFGS; Grado Universitario. Donde el CFGS es la preparación o ingreso a la Universidad. O sea, que no: «díganme de qué presumen y les diré de que carecen» y, si creen que la formación dual es un caos y que por ende toda la formación que va floreciendo también lo es, recuperen para sí la organización formal y reglada de la formación ocupacional que gestionaba el Inem para poner orden, desháganse del INCUAL o mejor aún: traspasen todo el Inem al MEC, llámenlo si quieren INCUAL, pero apliquen toda la estructura anterior tal y como se ha dicho en este escrito, pues: o no tienen seriedad alguna, o no tienen lo que dicen tener: forma y reglamento coherente. Ustedes dirán.

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