Pasotismo político y sufrimiento ciudadano
Ahora que a los políticos les toca -en mi opinión- hacer el teatro y paripé de turno, correspondiente a las campañas electorales municipales y autonómicas prometiendo como siempre, el moro y el tesoro, yo les pediría que por favor reparen en ciertos problemas que nos afectan a todos; a unos hoy y a otros seguramente mañana.
Desde hace un tiempo, por desgracia para mi, me veo en la necesidad de acudir con más frecuencia de la que desearía, al servicio de urgencias del Hospital de Cabueñes como acompañante de una familiar, que habiendo sido intervenida quirúrgicamente hace unos años, la cosa no salio tan bien como se esperaba y necesita ser hospitalizada con frecuencia.
Hace unos días, tras pasar por el domicilio un médico de urgencias, aconsejó acudir nuevamente al mencionado hospital. Esperar, cuatro o seis horas para saber si el paciente va a quedar ingresado o si va a recibir el alta, es una cruz que no le deseo a nadie, pero si además te ves obligado a hacerlo en esa especie de cuchitril reducido y maloliente que -a mi entender- es la sala de espera de urgencias en Cabueñes, eso ya se hace demasiado duro de soportar, máxime cuando es en la noche. Esta vez llegamos allí a las once de la noche y me tocó salir pasadas las cuatro de la madrugada, una vez que los servicios médicos de urgencias decidieron hospitalizar a la familiar que yo acompañaba. Puedo decir que de cuantas veces llevo acudiendo a ese servicio, ésta fue la vez que se me hizo más cuesta arriba. Cada vez aquello está peor.
No puede entender, que un hospital que da servicio a una zona de población tan amplia, tenga una sala de espera en urgencias, tan reducida y en zona sótano, por la que pasan al día cientos de personas que se ven obligadas a estar soportando de continuo un ambiente tan masificado y poco acogedor. Bastante sufrimiento llevamos cada uno encima pensando en el paciente al que acompañamos, para que luego la espera nos la hagan tan ingrata.
Señores políticos de la oposición: si quieren sacarle los colores a quienes hoy gobiernan el Principado, dense una vuelta por ese lugar, y encontraran filón de crítica para arremeter contra sus adversarios. Si luego ganan las elecciones, por favor, mejoren este tipo de cosas. Los ciudadanos, sabremos reconocérselo.
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