Predicar nun ye dar trigo
Leo en LA NUEVA ESPAÑA del sábado 16 de mayo que el señor Rajoy, con motivo de su corta estancia en Oviedo para hacer campaña electoral, reconoce que muchos jubilados han sostenido a los jóvenes en la crisis.
Señor Rajoy: si usted reconoce que esto es así, tiene por delante una estupenda ocasión para reconocerlo, no con palabras, sino con hechos. Si con sinceridad, y no con verborrea mitinera, reconoce que esto es así, ahora que dice que la economía española va viento en popa y que gracias a su buen hacer y el de su Gobierno las cosas vuelven a la normalidad y que nuestro país es, en lo del crecimiento económico, casi ejemplo para el resto de esta Europa coja durante tantos años de crisis, lo que debe hacer, según mi opinión, es actualizar las pensiones, de tal forma que los pensionistas recuperemos como mínimo todo lo que nos han hecho perder en los cuatro años que usted lleva gobernando.
Ustedes, que para tantas otras cosas recurren al caso alemán como ejemplo de lo que les conviene, deben saber que la Alemania de la señora Merkel, esa que tantas veces es criticada y denostada por pedir y hasta exigir que el resto de países de la zona euro sea responsable en sus gastos y los ajuste a sus posibilidades de ingresos, esa misma señora preside un Gobierno que acaba de aprobar una subida de pensiones de un 2,1 por ciento a partir del 1 de julio, ya que en ese país las pensiones siempre se actualizan en el segundo semestre del año. Compare usted ese porcentaje de subida de pensiones con ese rácano y casi insultante 0,25 por ciento o cuartillo que usted y su Gobierno nos aplicaron en enero a los pensionistas españoles, a pesar de tener, según usted, que sostener a nuestros jóvenes o descendientes.
Si tanto ustedes como los demás partidos en este país no fuesen tan despilfarradores en lo superfluo y más estrictos en el cumplimiento de lo presupuestado y conscientes de que una cosa es el deseo y otra la realidad, quizá no tendrían necesidad de estrujarnos tanto a los ciudadanos, pensionistas o no, en impuestos y tasas de todo tipo y les llegaría el dinero recaudado para cumplir dignamente con todo lo que prometen, como ahora, en campaña electoral y que pasado el día del recuento de los votos, si te he visto, no me acuerdo, y otros cuatro años a soportar cuanto les apetezca echarnos encima a los sufridos contribuyentes.
Razón tiene una vez más el refrán que dice que una cosa ye predicar y otra, dar trigo.
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